Vox pone la directa de cara a las elecciones catalanas
Abascal e Ignacio Garriga aprovechan la indefinición del PP y de Ciudadanos para hacer campaña en Cataluña
La formación confirma a Ignacio Garriga como candidato a Presidente de la Generalitat. “Llevamos tres años defendiendo a los catalanes honrados de los privilegiados separatistas”, ha dicho a través de redes haciéndose eco de las palabras de Abascal que le confirmaban como candidato. De esta manera, Garriga sella su ascenso meteórico dentro del partido, del que ya actúa como vicepresidente y número dos a todos los efectos.
Campaña desde el principio
Desde que el presidente Aragonès anunció el adelanto electoral, Vox no ha perdido ni un minuto. Los de Abascal y Garriga han hecho y hacen toda la precampaña que pueden. Están presentes en multitud de actos y son muy activos en redes sociales para insistir en los puntos clave de su discurso.
En esta línea, no pierden ocasión para hablar fundamentalmente de tres asuntos. La inseguridad, la amnistía (con fuertes críticas al PSC) y las necesidades del ciudadano corriente. Un vistazo a sus redes sociales revela un especial énfasis en todos estos asuntos. Así mismo, capitalizan los temas de actualidad como el drama de las prisiones catalanas y la muy cuestionada gestión de la consejera Ubasart.
PP y Ciudadanos se enredan ellos solos
Por otra parte, las dudas y titubeos electorales del PP y de Ciudadanos benefician a Vox. A pesar de que Alejandro Fernández es el candidato por aclamación popular, Feijóo y la dirección nacional del PP todavía no le han confirmado. Algo que necesariamente limita la exposición pública de Fernández, cada vez más reivindicada en redes incluso por sectores independentistas.
Por otro lado, Ciudadanos parece insistir en su propio declive y también se enreda en luchas internas a menos de dos meses de las elecciones. Una facción del partido naranja liderada por Adrián Vázquez quería un frente constitucional con el PP que, al final, no ha salido. No solo eso: esta situación se ha saldado con una fractura interna y con la dimisión del propio Adrián Vázquez.
Por lo demás, el viento electoral en Cataluña sopla a favor de opciones identitarias que tienen en común el deseo de enterrar el procés. Las razones están a la vista: inseguridad, una gestión ineficaz de la inmigración y unos impuestos extractivos para las clases medias. En este sentido, Sílvia Orriols ya ha confirmado su candidatura y abre una brecha igualmente en su competidor más cercano: Junts, que lo fía todo a la candidatura personalista de Puigdemont.
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