Trabajadores de prisiones estallan contra CCOO y UGT, que desconvocan la huelga de hoy

La tensión entre los trabajadores de prisiones y los sindicatos de CCOO y UGT se arrastraba desde hacía tiempo. Sin ir más lejos, hace menos de un mes, ambos sindicatos accedieron a reunirse con Ubasart, algo a lo que los trabajadores siempre se han negado. En este sentido, su postura ha sido clara y constante: primero, que dimitan tanto ella como Calderó.

Al final, Comisiones Obreras y la UGT cedieron a la presión de los trabajadores y dejaron plantada a la consejera Ubasart. Pero lo cierto es que han mantenido reuniones con subalternos de Ubasart e incluso con figuras por encima de la propia consejera. Por esto, que no se reunieran con Ubasart no ha enterrado ni mucho menos la tensión que hay entre funcionarios y estos sindicatos. También con la Intersindical y Catac, que, a pesar de casi no tener representación, tienen “bastante poder”, denuncian los trabajadores.

Según ha podido saber E-Notícies por fuentes penitenciarias, los trabajadores tienen bastante claro que CCOO y UGT “quieren ayudar a ERC a tener una campaña lo más calmada posible”. Es más, la huelga que estaba prevista para hoy, convocada por estos dos sindicatos y la Intersidical y Catac (CSIF, una de las mayoritarias, estaba en contra), finalmente ha quedado desconvocada. Muchos trabajadores de los centros penitenciarios ya estaban en contra de la huelga, pero su desconvocatoria no ha hecho más que confirmar sus rumores.

“No han pisado un patio de prisión en años”

Si UGT y Comisiones Obreras apoyaban la huelga (finalmente desconvocada), era para quedar bien. O esto es lo que piensan los funcionarios, que señalan que esta huelga la secundarían muy pocos trabajadores. Además, los servicios mínimos decretados, en muchos ámbitos superaba el número de efectivos que se destinan en un día normal. Por lo que la incidencia en el día a día de los centros hubiese sido mínima.

El motivo de fondo es una dirección sindical partidista e interesada que quiere ponérselo fácil a ERC en un momento en el que los republicanos tienen muy malas perspectivas electorales. En este sentido, los trabajadores dicen “estar hartos de que nos digan qué es lo que queremos”.

Tal y como informan fuentes penitenciarias a este medio, esta separación entre trabajadores y sindicatos se manifiesta en una autoorganización paralela. Hablan, por ejemplo, de asambleas, ruedas de prensa con portavoces escogidos por ellos mismos y una manifestación sin precedentes en Madrid. Hace tres días, se fueron hasta Zaragoza para preguntarle a Amand Calderó que si el asesinato de una trabajadora no era motivo suficiente para dimitir.

Aunque lo más destacado es una encuesta interna que revela que solo un anecdótico 7% de los trabajadores decía estar a favor de secundar la huelga de hoy. Por por lo que explican a E-Notícies, ese 7% parece tratarse de personas que tienen intereses personales en ciertos beneficios derivados de su presencia en los sindicatos. Además de que algunos de ellos “no han pisado un patio de prisión en años”, apuntan.

Esta situación revela que la huelga oficial de hoy tenía toda la pinta de ser una profecía autocumplida de estos sindicatos. Es decir, organizar una huelga sin apoyo de los trabajadores para que, así, sea un previsible fracaso y ERC pueda decir que tienen la situación controlada. Algo que, dadas sus perspectivas electorales y su gestión de las protestas - motivadas, recordemos, por el hecho inédito del asesinato de una trabajadora -, ahora le viene muy bien a ERC. Al final, ni eso.