Chelo, la enfermera que ha muerto ahogada en el mar: ‘Mamá, no te metas tan adentro’
Su hija María le advirtió del peligro que corría mientras se bañaba
Tragedia en una playa de Ribadeo (Lugo), después de que la ovetense María Consuelo Ginzo Gonzalo ‘Chelo’, de 49 años, perdiese la vida en Os Castros.
Lo cierto es que esta enfermera del Hospital Álvarez Buylla de Mieres (Asturias), se golpeó accidentalmente contra unas rocas. Y todo debido al mal estado del mar en la playa donde se encontraba bañándose el viernes 30 de junio.
Según han expuesto el servicio de Emergencias 112 de Galicia, el suceso se produjo en torno a las 18:00 de la tarde. Y es que la mujer fue vista por varios bañistas que contactaron con Emergencias para avisar de la crítica situación en la que se encontraba Chelo.
Fallece una enfermera de 49 años en la playa de Os Castros (Ribadeo)
El caso es que habían visto a Chelo flotando en el agua después de golpearse contra unas rocas. Una vez que llegaron los sanitarios y tras rescatada por varios bañistas, la mujer se encontraba en parada cardiorrespiratoria.
Los sanitarios le realizaron diversas maniobras de reanimación en torno a una hora sobre la propia arena de la playa, pero sus intentos fueron inútiles.
Finalmente, Chelo fue trasladada a un centro hospitalario cercano, en este caso al Hospital da Mariña en Burela, y acabó falleciendo el pasado sábado.
Chelo se adentró en el mar demasiado a pesar de los gritos de alerta de su hija
Chelo tenía una hija, María Calzón. Hay que reseñar que previamente al golpe que se dio con las rocas en plena playa de Os Castros, Chelo era advertida por ella. Desde la lejanía le aconsejaba que no se metiera tan dentro debido a las malas condiciones de oleaje de la citada playa.
Parece ser que María le gritó así a su madre para alertarla del peligro. “Mamá, no te metas tan adentro, sal para fuera”. Una advertencia que no sirvió de mucho y que acabó de la forma más trágica posible
Tanto ella como sus padres José Ángel y María Josefa, junto al resto de la familia, incineraron sus restos mortales este domingo. Este trágico proceso se llevó a cabo en el tanatorio de Los Arenales de Oviedo.
Lo cierto es que Chelo era una persona muy valorada en el hospital de Mieres donde trabajaba hace bastantes años.
En el Área de Psiquiatría, nada más conocer la noticia, estaban muy afectados por ello y recordaban muchos que “era muy buena persona y mejor compañera. Pero, sobre todo, eres una gran profesional, muy atenta siempre con los pacientes a los que atendía”, eran las palabras de alguno de sus compañeros.
“No me puedo creer que ya no esté con nosotros”
La luctuosa noticia ha corrido como la pólvora entre todo el Servicio de Salud del Principado y hoy muchos de sus trabajadores estaban incrédulos. “Es que no me puedo creer que ya no esté con nosotros”, ha lamentado un antiguo compañero de Chelo.
En cuanto al operativo de rescate llevado a cabo, intervinieron el helicóptero Pesca II del Servicio de Guardacostas de Galicia y la Salvamar Alioth.
Además, desde el 112 de Galicia se pidió la intervención de Urxencias Sanitarias de Galicia 061, de la Policía Local y de la Guardia Civil. Además, Agrupaciones de Voluntarios de Protección Civil de Ribadeo y Barreiros también estuvieron presentes en el dispositivo.
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