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El cambio que ha anunciado la Seguridad Social con el Ingreso Mínimo Vital en 2024
El Gobierno está dispuesto a traspasar el Ingreso Mínimo Vital a las comunidades autónomas que así lo soliciten
La Seguridad Social tiene previsto acometer una importante variación en 2024 que afectará al Ingreso Mínimo Vital. En principio, dicha modificación no debería influir sobre los beneficiarios, aunque sí sobre su gestión y control.
El Gobierno tiene previsto negociar el traspaso de dicha ayuda a las comunidades que así lo reclamen. De esta manera se continuaría el camino iniciado por el País Vasco y Navarra, que ya lo administran desde hace algo más de un año.
Detrás de esta concesión del Ingreso Mínimo Vital a las comunidades, hay un motivo de operatividad. Y es que son los servicios sociales regionales y locales los que cuentan con un mayor conocimiento de las necesidades de su población más vulnerable.
Hasta la fecha, la Seguridad Social se había encontrado con un serio contratiempo. Era su incapacidad para llegar a los potenciales beneficiarios del ingreso mínimo. Mucha gente que reunía los requisitos no lo demandaba por desconocimiento o por temor a la regularización. No hay que olvidar que el cobro de esta ayuda obliga a la presentación de la declaración de la renta.
El traspaso del Ingreso Mínimo Vital forma parte de las cesiones pactadas
Pero más allá del sentido operativo que implica la concesión del Ingreso Mínimo Vital a las comunidades, también hay que abordar una cuestión política. Esta decisión forma parte también de las cesiones pactadas con los partidos que sustentaron la investidura de Pedro Sánchez.
De alguna manera, esta medida busca apaciguar los ánimos entre algunos presidentes autonómicos. Durante las últimas semanas habían mostrado su malestar por los beneficios facilitados a algunos territorios.
En el País Vasco, por ejemplo, se trabaja con el traspaso de la gestión económica de la Seguridad Social. Por su parte, con Cataluña, ya se arrancó el compromiso hace unas jornadas para traspasar el Ingreso Mínimo Vital.
El Ingreso Mínimo Vital, en funcionamiento desde 2020
El Ingreso Mínimo Vital se puso en marcha en el verano de 2020, a raíz de que estallara la pandemia. En aquel momento, el departamento que dirigía José Luis Escrivá mostró su preocupación por el riesgo que implicaba conceder esta ayuda a las autonomías.
Se pensó en este subsidio como un sustitutivo de las históricas rentas vitales de inserción que manejaban las propias comunidades. Comprobaron que había mucha desigualdad entre las distintas regiones. Tanto en los niveles de cobertura como en las cantidades de acceso.
De ahí que decidieran equiparar el esquema de ayudas. Por lo tanto, se decantaron por fijar unas cuantías según la carga familiar y que variaría según la situación patrimonial del beneficiario.