Primer plano de Patrícia Plaja con la boca ligeramente abierta mientras habla en una rueda de prensa del Govern
POLÍTICA

El Govern pide 'huir de discursos alarmistas' tras los últimos crímenes en Cataluña

Aseguran que hay que evitar 'discursos populistas, racistas y demagogos que sirven para alimentar a la extrema derecha'

Tres asesinatos en la noche de Sant Joan, cuatro más en los últimos días y una criminalidad al alza. Esta es la situación del auge de la delincuencia en Cataluña. Sin embargo, el Govern de la Generalitat ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad, advirtiendo que hay que "huir de discursos alarmistas".

La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, ha comparecido hoy ante los medios tras la habitual reunión de los martes del Consejo Ejecutivo. No lo ha hecho ni el president de la Generalitat, Pere Aragonès, que ni siquiera se ha pronunciado en público respecto a la oleada de crímines que ha vivido Cataluña en los últimos días. Ni tampoco Joan Ignasi Elena, consejero del Interior, que sigue en el ojo del huracán y sin dar la cara ante estos días convulsos en los que se han registrado siete crímenes en menos de una semana.

La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, durante una rueda de prensa tras la reunión del Consell Executiu, en el Palau de la Generalitat

Patrícia Plaja ha admitido que Cataluña ha vivido un "Sant Joan trágico" por el asesinato de tres personas -dos en Gerona y uno en Barcelona. Unos hechos que la portavoz del Govern ha calificado de "extremadamente graves".

Sin embargo, Plaja también se ha mostrado preocupada por las consecuencias que puedan tener estos hechos delictivos. Ya no por la inseguridad creciente que sufren los ciudadanos catalanes, claro, sino por las consecuencias políticas que puedan tener.

"Es importante hablar de seguridad, pero huyendo de discursos alarmistas, populistas, racistas y demagogos que sirven para alimentar las peligrosísimas infamias de la extrema derecha", ha asegurado Patricia Plaja. 

La portavoz del Govern de la Generalitat también ha defendido que "los dispositivos de seguridad propios de la verbena de Sant Joan eran los adecuados y los proporcionales". Y que los "dos hechos que sucedieron"[el doble asesinato de Gerona y el de Barcelona]"podrían haber sucedido la noche de Sant Joan o cualquier otra noche". En cualquier caso, ha admitido que "se tiene que afrontar el debate sobre la seguridad en Cataluña, pero hacerlo siempre desde la calma".

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