Europa escoge el miércoles si facilitar la deportación de inmigrantes ilegales

Europa está en una deriva de opciones políticas identitarias que surge como reacción al combo de inmigración, inseguridad e inflación. Los actuales líderes europeos lo ven venir y ya han empezado a cambiar su discurso.

Sin ir más lejos, nada menos que el canciller alemán, Olaf Scholz, ya habló de deportaciones masivas. Por otro lado, el presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, fue muy criticado por hacer concesiones en estas materias a grupos identitarios.

A lo que apunta todo esto es a que las élites políticas europeas dan por descontado el valor electoral de la inmigración. Las elecciones europeas del próximo junio serán muy reveladoras a este respecto. Pero antes de llegar a junio llegará el día de mañana, que es miércoles 10, la fecha en la que el Parlamento Europeo debate importantes reformas en el reglamento para deportar irregulares.

Más control migratorio

La reforma de Eurodac permitirá extender tanto la calidad como la cantidad de los datos destinados a identificar inmigrantes irregulares. El objetivo es que incluya nuevos elementos como huellas dactilares, imágenes faciales y diversos documentos de viaje. De este modo, la UE pretender estandarizar criterios para que sea más fácil hacer deportaciones.

La variedad de sistemas entre los países llevaba a que fuera relativamente sencillo proceder a fraudes en los diversos sistemas de seguridad social de los países. Al margen, claro, de la cuestión de seguridad, que es prioritaria. Si la reforma sale adelante, se dispondrá de una base de datos individualizada por cada migrante.

Así mismo, se reduce de catorce a seis años la edad para poder recoger información personal. Además de hacer más exhaustivo el control, se pretende disponer de más datos de los menores con dos objetivos. El primero, facilitar la repatriación con las familias, y el segundo, controlar a aquellos menores no acompañados que puedan ser más susceptibles de acabar en la delincuencia.