Pablo Urdangarin sigue el consejo de Letizia y toma la misma decisión que Leonor
Pablo Urdangarin ha tomado una importante determinación en pro de su privacidad y también de su tranquilidad
Pablo Urdangarin está atravesando un buen momento a nivel personal, pues está feliz con su novia, Johanna Zott. Además, se encuentra entregado a sus estudios y a su trabajo como jugador de balonmano del Granollers. Sin embargo, también tiene problemas, porque la situación familiar es bastante tensa por diferentes motivos.
Precisamente por esta última razón, por sus problemas de familia, Pablo Urdangarin ahora ha tomado una decisión. Siguiendo el consejo de su tía Letizia y la postura de su prima Leonor, ha cerrado al público sus redes sociales.
Pablo Urdangarin hace caso a su tía Letizia y a su prima Leonor
Pablo Urdangarin, sin lugar a dudas, es el hijo más conocido y popular de Iñaki y la infanta Cristina. Lo es porque juega en un equipo de balonmano, el Granollers, y porque es el que más ha hablado delante de las cámaras. En efecto, lo ha hecho para sacar la cara por su padre, que ha sido cuestionado por su relación con Ainhoa Armentia.
El joven siempre ha sido muy educado y respetuoso con los medios, como también en las redes sociales. Concretamente, en Instagram, cuyo perfil tenía abierto y nos había permitido ver imágenes de él jugando, con sus hermanos y con su padre. Incluso disfrutando de sus hobbies y aficiones, como es el caso de la música.
No obstante, Pablo, de un tiempo para acá, ha decidido seguir el consejo de su tía Letizia. Esta tiene claro que lo mejor es tener los perfiles en redes totalmente privados, idea que ha inculcado a sus hijas. De ahí que ahora él ha cerrado al público su cuenta como instagramer, en la que posee 1082 seguidores.
Con este gesto, no solo ha decidido hacer caso a la Reina, es que también ha seguido los pasos de su prima Leonor, con la que precisamente no tiene buena relación. Y es que esta, según unos rumores, tiene privada su cuenta en redes sociales aunque, según otros, directamente no posee ninguna. Todo lo contrario que su prima Victoria Federica, que ya es toda una influencer.
Sea como sea, el joven Urdangarin ha decidido cerrar a cal y canto su perfil social. Lo ha hecho posiblemente en pro de su privacidad, de su intimidad y con el objetivo de no estar continuamente en el disparadero mediático.
Desea que su vida personal y familiar esté lo más alejada posible del foco público. Es la manera de que él y todo su entorno estén tranquilos. Y eso que es difícil, porque cuando no saltan a la luz escándalos de su abuelo materno, cobra relevancia el divorcio de sus padres o la nueva relación de Iñaki.
Tan importante es para Pablo Urdangarin y su círculo, su privacidad, que también sus hermanos tienen cerrados a todo el mundo sus perfiles en Instagram. Nos estamos refiriendo a Juan, Irene y Miguel.
Pablo Urdangarin, al igual que Leonor, no sigue la moda europea
Pablo Urdangarin, con este gesto de privatizar sus redes, ha seguido la estela de su prima Leonor, pero ha hecho lo contrario de lo que está sucediendo entre la realeza europea. Claro, porque son muchos los miembros de las casas reales del continente que sí están activos en aquellas y, además, con cuentas abiertas.
Por ejemplo, entre quienes tienen sus perfiles y comparten con sus seguidores impresiones e imágenes se encuentra Victoria de Suecia. Lo mismo hace Amalia de Holanda, la hija de los Reyes y heredera al trono de su país, Charlene de Mónaco, los duques de Cambridge y la princesa Magdalena de Suecia. Sin olvidar a los duques de Sussex y a Carlos Felipe de Suecia.
Eso sí, también cuentan con perfiles públicos otros reconocidos miembros reales de todo el mundo. Un claro ejemplo es la reina Rania de Jordania.
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