Getty Images Signature, Shutter2U El truco sencillo para que los neumáticos duren hasta un 40 % más de tiempo
Es posible alargar la vida útil de los neumáticos con una presión adecuada y con una conducción poco agresiva
Hay un truco muy simple que nos permitirá alargar la vida útil de los neumáticos. El cambio de ruedas debe hacerse, por lo general, entre los 40.000 y 50.000 kilómetros. Sin embargo, tenemos en nuestra mano la posibilidad de ampliar este periodo.
Al igual que ocurre con el ahorro de combustible, una conducción sosegada, sin grandes frenadas o acelerones salvajes, nos permitirán incrementar su duración. Pero para sacarle un mayor rendimiento a las ruedas hay otra clave que pasa desapercibida para la mayoría de conductores.
Consiste en circular con la presión adecuada, tan simple como eso. Cuando lo hacemos con más de la cuenta, lo que se consigue es desgastar la parte central de la goma. Esto es así debido a que todo el peso del vehículo descansará sobre una superficie muy reducida.
Por su parte, cuando la presión es muy baja tiene lugar una deformación de la goma que apoyará sobre todo en los extremos. Con una presión óptima, el peso se reparte por igual en toda la banda de rodadura, por lo que el deterioro se produce de manera uniforme.
Hay otro detalle a tener en cuenta y que deberían contemplar los conductores. Pasaría por sustituir los neumáticos entre los ejes del neumático cuando se alcanzaran los 20.000 kilómetros. Se estima que llegados a este punto todavía les restan un 50 % de uso.
Conseguiremos así que el desgaste en los dos ejes sea uniforme siempre que las ruedas estén correctamente equilibradas. La vida útil de las gomas debe superar los 40.000 kilómetros, y en el caso de que no sea así, esto dará muestras de una conducción inadecuada o de fallos mecánicos.
Por qué deberíamos cuidar de los neumáticos
El estado de los neumáticos es algo en lo que debe reparar todo conductor. Por cuestiones de seguridad debe concedérsele una especial importancia a esta parte del vehículo. De ahí que merezca la pena equiparlo con unas gomas de cierta calidad, sobre todo si hacemos muchos kilómetros.
La sustitución de las mismas puede rondar en torno a los 400 euros. Los expertos recomiendan huir de las marcas desconocidas o de bajo coste, que posiblemente no reúnan las garantías que exige un automóvil.
Es cierto que a lo largo del último año el coste de los neumáticos se ha disparado sobre un 30 %. Y lo más probable es que se mantenga esta subida. Pero cuando se trata de seguridad, merece la pena invertir en buenos neumáticos.
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