Cedida Ridículo de la manifestación Anti Vox en Barcelona
Solo lograron reunir un puñado de personas en plaza Sant Jaume
La posibilidad de que el próximo 23 de julio Vox tenga la llave de la gobernabilidad en España ha desatado el pánico en la izquierda. Los partidos progresistas e independentistas ya no dudan en plantearlo como un plebiscito. O ellos “o la extrema derecha”.
Pero parece que el empeño en señalar a Vox no consigue pasar por ahora de algunas consignas y obsesiones políticas. Una imagen vale más que mil palabras. La de la concentración convocada este pasado sábado en la plaza Sant Jaume de Barcelona, a la que apenas acudieron un puñado de personas.
Éxito de la macroconcentración contra VOX de ayer por la tarde en la Plaza de San Jaime de Barcelona
Este vídeo atestigua el exiguo poder de convocatoria de la concentración con lemas como “STOP Vox” o “Unidad contra el fascismo”. Apenas medio centenar de personas se dieron cita para protestar contra “la extrema derecha”. Los organizadores reiteraron la “necesidad de unidad” frente a “Vox y otras candidaturas similares”.
Auge de Vox en Cataluña
La concentración tenía como objetivo protestar contra la entrada de Vox en municipios catalanes en las elecciones del 28 de mayo. Hay que recordar que la formación verde se coló en todas las capitales de provincia. Y que mejoró resultados en núcleos como Mataró, Terrassa, L’Hospitalet y Cerdanyola.
La formación verde sigue creciendo en el terrtiorio catalán | Europa Press
A pesar de los cordones sanitarios y los discursos anti-Vox, la formación ha dado un salto importante en Cataluña. En Barcelona, Tarragona, Lleida y Girona, donde hasta ahora no tenía representación, ahora suma dos concejales. Y suma más escaños en territorios como Figueres y Manresa.
Ante el retroceso de otras opciones como el independentismo, los partidos han recuperado el discurso del miedo a Vox. Uno de los organizadores de la concentración, Dani Celma, ha pedido “impedir que sus representantes gobiernen o tengan la posibilidad de influir en las políticas de los municipios”.
Cada vez menos apoyo
Las elecciones del 28 de mayo dibujaron un claro hartazgo de los catalanes hacia los partidos tradicionales. Y la apertura de un nuevo espacio hacia opciones como Vox. O como Aliança Catalana, un partido independentista y antiinmigración que ha dado la sorpresa como fuerza más votada en Ripoll.
El ridículo de la manifestación Anti Vox de este fin de semana confirma la pérdida de poder de convocatoria de estos sectores. Las últimas encuestas dan una ligera pérdida de diputados a Vox (de 53 a 48). Pero contaría con los suficientes como para dar la llave del Gobierno al PP de Alberto Núñez Feijó.
El líder de los populares, de momento, trata de mantener las distancias y niega que vaya a pactar “con los ultras”. Pero Abascal tiene las ideas claras. Ha pedido al PP respeto para sus votantes, y ha pedido un pacto antes del 23-J para aclarar los escenarios.
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