La polémica ley trans catalana, otro fracaso del Govern

Esta semana se ha disuelto oficialmente el Parlament de Catalunya. Con la convocatoria de elecciones anticipadas, la legislatura se da por finalizada. Solamente queda en pie la Diputación Permanente, que se encarga de que la cámara catalana mantenga sus poderes en periodos entre legislaturas.

Con la disolución del Parlament no solo se frena toda la actividad parlamentaria. También caen, por ejemplo, 49 preposiciones de ley de los grupos con representación, 5 propuestas de ley para trasladar al Congreso de los Diputados y 17 proyectos de ley que tenía preparados el Govern.

También caen los anteproyectos de leyes que estaba elaborando la Generalitat y que, dando que se estaban confeccionando, todavía no habían iniciado sus trámites en el Parlament. Entre ellos está la polémica ley trans que quería impulsar la Consejería de Igualdad y Feminismos de Tània Verge.

La publicación del anteproyecto que había elaborado el equipo de Verge generó mucha polémica. Sobre todo, porque se trataba de un texto que iba mucho más allá de la no menos polémica ley trans impulsada por Irene Montero. Una ley aprobada en el Congreso gracias a los votos de PSOE, Podemos, ERC, Junts, Compromís, Bildu, PNV, BNG, Más País y Coalición Canaria.

Las intenciones de Tània Verge eran, por ejemplo, que los menores de 12 a 15 años pudieran empezar el tratamiento médico aunque sus padres estuvieran en contra. En estos casos, la administración hubiera mediado defendiendo la voluntad del menor. También se apostaba por permitir a los hombres biológicos participar en competiciones deportivas femeninas o incluir la casilla de "no binarios" en los documentos oficiales de la Generalitat.

Lógicamente, este anteproyecto de ley generó muchas críticas. Feministes de Catalunya, por ejemplo, explicaron a E-Notícies todas las consecuencias negativas que podría haber si el texto fuera aprobado. También miembros del PSC, partido que en el Congreso votó a favor de la ley de Montero, mostraron sus reticencias al proyecto del Govern.

En cualquier caso, con la caída del Govern también provoca la caída de esta polémica ley, algo que sin duda celebrarán muchos sectores de la sociedad. Y es que, tras las nefastas consecuencias de la ley trans estatal, el texto catalán hubiera generado aún más problemas no solo legales, sino también de convivencia o de igualdad en el deporte femenino, entre otros.