Junts per Catalunya, PSC Junts vuelve a escoger al PSC
El partido de Puigdemont tiende la mano a los socialistas en Vilafranca
La reconfiguración del mapa político municipal en Cataluña va dibujando una nueva estrategia de pactos con una tendencia clara: la sociovergencia. Salvando la lógica disputa por la alcaldía de Barcelona, los postconvergentes y los socialistas tratan de entenderse para fraguar mayorías en varios ayuntamientos.
ERC, la gran perjudicada en las elecciones del 28M, apuesta claramente por reconstruir la unidad estratégica del independentismo. Su apoyo al gobierno de Xavier Trias (Junts) en Barcelona y el rechazo a gobernar con PSC y Comuns es el mejor ejemplo. Pero el partido de Puigdemont parece tener otros planes.
Junts tiende la mano al PSC
Una de las alcaldías que sigue en aire es la de Vilafranca del Penedès (Barcelona), municipio gobernado desde hace una década por Junts con el apoyo del PSC. Las elecciones han cambiado las tornas: Junts pasa de 7 a 5 concejales y cede la primera plaza al PSC, que pasa de 5 a 8.
Ahora el PSC anuncia su intención de gobernar en minoría con 8 de los 21 concejales del consistorio. Pero Junts vuelve a abrir la puerta de la sociovergencia y extiende la mano al PSC para que reconsidere su posición y retomen la coalición.
El líder de Junts en Vilafranca, Aureli Ruiz, va un paso más allá y amenaza con fraguar un gobierno alternativo con ERC y CUP para desbancar al PSC. “No me planteo estar en la oposición”, ha afirmado.
En realidad la llave de la investidura la tiene la CUP, que ya ha anunciado su intención de no votar a favor ni de Junts ni del PSC. Con su abstención favorecería la investidura del socialista Francisco Romero, que gobernaría en minoría. Pero los juntaires no tiran la toalla y presionan al PSC para un pacto de estabilidad.
Nuevos equilibrios
El movimiento en Vilafranca ocurre en plena recomposición del panorama político en Cataluña. La unidad inquebrantable ERC-PSC se diluye poco a poco: los republicanos, en horas bajas, priorizan la unidad estratégica del independentismo, y los socialistas, ahora como primera fuerza del país, se inclinan más por la alianza con Junts.
Todos quieren pactar con el PSC | ACN
Fuera de los focos de Barcelona, el gran partido se juega en la Diputación de Tarragona. Junts y ERC son conscientes de la importancia de su decisión para el futuro del independentismo, pero mientras se lanzan acusaciones y negocian a sus espaldas con los socialistas.
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