Imagen de un militante de la CUP en Berga con el puño alzado

POLÍTICA

La CUP también pacta con el PSC

Los anticapitalistas y los socialistas se ponen de acuerdo en dos alcaldías

El convulso panorama surgido de las elecciones municipales en Cataluña ha abierto una interesante política de pactos. El hundimiento de ERC y el ascenso del PSC a primera fuerza convierten al partido de Salvador Illa en el socio preferente de Junts. Pero la ruptura del espacio independentista va incluso más allá.

La sociovergencia fraguada en los ayuntamientos y entidades supramunicipales tiene su réplica con otro actor sorpresa, la CUP. La formación anticapitalista, a las antípodas del PSC, decidirá las alcaldías de Vilafranca del Penedès (Barcelona) y Sarrià de Ter (Girona) mediante acuerdo directos o tácitos con los socialistas.

Vilafranca: la CUP da la alcaldía al PSC

En Vilafranca, los resultados electorales del 28M dibujan dos posibles salidas: un gobierno en solitario del PSC (8 concejales) o una coalición Junts-ERC (12 concejales). La llave la tienen los dos concejales de la CUP.

Las dos formaciones independentistas propusieron a los ‘cupaires’ votar a favor de la coalición. Reunidos en asamblea, los anticapitalistas han optado por abstenerse en la votación de investidura (lo cual en la práctica dará la alcaldía al PSC). Dicen cumplir así la promesa electoral de no pactar ni con Junts ni con el PSC.

Aunque no es exactamente un pacto CUP-PSC, sí es llamativo por lo que supone. La CUP da un portazo a Junts y ERC, y frustra la formación de un gobierno independentista en el municipio.

Sarrià de Ter: gobernarán con los votos socialistas

Un pacto entre la CUP y el PSC pondrá fin a dieciséis años de gobierno de ERC en Sarrià de Ter, el pueblo del expresidente del Parlament Roger Torrent. Los ‘cupaires’ dejan claro que no se trata de un acuerdo de gobierno, sino solo de investidura. Pero tampoco se cierran a incorporar a los socialistas en el ejecutivo para dar estabilidad a la legislatura.

El pacto ha sido posible después de que la CUP, con el 42,8% de los votos, superara a ERC como primera fuerza en el municipio. Los anticapitalistas suman seis concejales por cuatro de los republicanos. El PSC, con dos escaños, favorecerá el gobierno de la lista más votada.

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