La irrupción de Sílvia Orriols aflora las contradicciones en el independentismo

Pasan los días y Sílvia Orriols sigue siendo objeto de análisis y críticas por parte de los medios de comunicación. Ya hace dos semanas del arrollador triunfo de Aliança Catalana (AC) en las elecciones municipales de Ripoll. Pero los focos siguen puestos sobre la líder del partido identitario. Y con los días, va quedando claro que su aparición ha hecho aflorar diferencias y contradicciones en el mundo independentista.

Sílvia Orriols y su Aliança Catalana son considerados por muchos como el “VOX independentista”. Y es que, a pesar de coincidir en varios aspectos sobre la lucha contra el islamismo radical, la principal diferencia entre los dos partidos es que AC es abiertamente separatista.

El éxito de Sílvia Orriols y posicionamiento antiinmigración e independentista ha abierto un debate que genera mucha división. Y un ejemplo claro se pudo ver a partir del editorial que hizo Vicent Partal en su digital el pasado miércoles. El director de Vilaweb intentó analizar el éxito de Aliança Catalana y no dudó en calificar de “extrema derecha” a la líder de este partido.

Habitualmente, las editoriales de Partal generan bastante unanimidad entre sus lectores y suscriptores. Pero esta vez no ha sido así. En la sección de comentarios se puede comprobar una clara polarización entre partidarios y detractores de Sílvia Orriols. En otros espacios de debate en las redes sociales, también se puede comprobar esta división en el independentismo.

“Entrevista a salafistas”

Sílvia Orriols no dudó en contestar el editorial de Vicent Partal en la que la califica de “extrema derecha”. La líder de Aliança Catalana lo hizo en su cuenta de Twitter para cargar contra el director de Vilaweb. Y es que Orriols le recordó que “es ese señor que entrevista a salafistas, pero que niega la palabra a una edil escogida democráticamente en las urnas. No me merece ningún respeto”.

Sílvia Orriols hace referencia a la entrevista que Vilaweb hizo a Mohamed Said Badaoui. Este caso generó mucha polémica hace unos meses, ya que Badaoui fue expulsado de España acusado de “practicar y difundir el salafismo radical”. La Policía lo consideraba un peligro para la seguridad y lo acabó expulsando a Marruecos.