ERC y Junts vuelven a votar a favor de una moción del PP sobre Rodalies

Segundo tirón de orejas para el ministro Óscar Puente a cuenta del desastroso funcionamiento de Rodalies (y otros servicios). El primero fue el pasado 25 de septiembre, cuando una iniciativa del PP en el Senado para reprobar a Puente encontró el apoyo de Vox, Junts y ERC. El segundo tirón de orejas ocurrió ayer y con el mismo patrón: una alianza inverosímil de PP, Vox, Podemos y el procesismo.

Con una amplía mayoría, el Congreso de los Diputados volvió a condenar la “incompetencia” de Puente en la gestión ferroviaria. Aunque hay que tener presente que la reprobación de un ministro no tiene ningún efecto jurídico o político. Se trata de una manera de presionar a un Gobierno y de darle recorrido mediático a la mala gestión del ministro del ramo en cuestión.

El caso del ministro Puente, eso sí, es particular. Porque a la numerosa lista de problemas que hay en transportes se le une el duro perfil político del ministro. Y si el procesismo de Junts y ERC se unen a esta ofensiva contra Puente es porque la insostenible situación de Rodalies les obliga a hacerlo, aunque lo hagan con la boca pequeña.

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De las intervenciones parlamentarias de Junts y ERC destacaron más las críticas al PP que al ministro. Como es evidente, el procesismo quería evitar a cualquier precio que les alinearan con la derecha española. Esto explica que hubiera más reproches para los populares que para el actual responsable de la cartera de Transportes.

“Señores del PP, les tendría que dar un poco de vergüenza presentar una iniciativa así”, dijo Isidre Gavin, diputado de Junts, antes de votar la iniciativa del PP. “Gran parte de las incidencias vienen del mal estado de las infraestructuras, y la culpa es suya[del PP]”, añadió Inés Granollers, de ERC, que también dijo que a los populares les tendría que dar “vergüenza” su actitud durante años.

Esto explica que no haya habido mucho ruido mediático en Cataluña a propósito de este asunto, como sí ocurre cuando Junts vota solo con el PP o ERC con el PSOE. Las cuentas en redes sociales de las principales figuras de Junts o ERC se destacan por su silencio. De hecho, ni los propios diputados que defendieron el voto han hecho publicidad en redes.

Máxima incompetencia política

Más allá de estos caprichos del parlamentarismo,  lo relevante es lo que explicábamos ayer en E-Notícies: que Rodalies es un problema de primer orden para los ciudadanos. Mientras tanto, políticos de todos los colores capitalizan un problema social que no hace más que empeorar. Según se mire, las referencias a lo que ocurría hace veinticinco, diez o cinco años son precisamente una prueba de esta situación de incompetencia crónica.

El último en prometer la solución a este problema ha sido Salvador Illa, que asegura que en enero de 2025 se iniciará el traspaso. Por el momento, no empieza bien porque los trabajadores ya caldean el ambiente para una huelga. Si no hay un doble acuerde entre el Ministerio y la Generalitat, el comité de empresa de Renfe adelanta que irán a la huelga.

Si esto ocurre, el ciudadano puede dar por descontado que, pase lo que pase, el servicio seguirá funcionando mal y nadie tendrá la culpa. Es más, los partidos no tardarán en buscar una manera responsabilidades ajenas. Desde Puigdemont diciendo que Salvador Illa está más preocupado de saludar al Rey, hasta Alejandro Fernández publicando tuits en redes sociales.