'En Ripoll no hay ningún problema con el Islam'

Más presión para Junts en Ripoll. ERC eleva el tono contra la Aliança Catalana de Sílvia Orriols y urge a Junts a cerrar un acuerdo para impedir un gobierno del partido independentista y antiinmigración. En una entrevista en El Món a RAC1, la candidata de los republicanos a la alcaldía, Chantal Pérez, ha negado que en Ripoll haya un problema con el Islam y ha tildado a Sílvia Orriols de “ultracatólica”.

Ante la indecisión de Junts, ERC, PSC y la CUP han cerrado en las últimas horas un pacto para formar un gobierno alternativo en la localidad. Para conseguir la mayoría necesaria necesitan el apoyo de los diputados de Junts. “Estamos a la espera de la respuesta, pero espero que Junts se acabe sumando”, ha afirmado Pérez.

ERC, todos a una

A diferencia de Junts, donde hay un debate interno sobre si dejar gobernar a la lista más votada o facilitar un gobierno alternativo, en ERC la consigna ha sido clara: Aliança Catalana es un partido de “extrema derecha” y hay que impedir que gobiernen a pesar de defender la independencia de Cataluña.

Chantal Pérez, que será alcaldesa si finalmente Junts se suma al acuerdo, ha ratificado la estrategia de ERC en este tema: “En Ripoll no hay ningún problema con el islam, hay un problema de convivencia, pero no son exclusivos de los inmigrantes”.

Pérez ha atribuido el éxito de Sílvia Orriols al hecho de que “con un discurso muy fácil que llega a mucha gente, ha culpado de los problemas sociales y económicos a los más débiles. Ha buscado culpables”. Para la edil, “señalan a todo un colectivo como culpable de los males de nuestra sociedad”. 

Pacto anti-Orriols

Chantal Pérez justifica así el pacto anti-Orriols en Ripoll, ya que, según dice, “no podemos dejar que gobierne un partido que defiende postulados de extrema derecha”. También rebate la tesis de parte de Junts, como Laura Borràs, según la cual hay que dejarles gobernar para demostrar que están equivocados. “Presuponer que gobernaran mal es mucho presuponer. Quizás no lo harán como nosotros querríamos, pero de aquí a decir que lo harán mal…”.

Quedan cuatro días para la investidura, y toda Cataluña mira hacia Ripoll, la localidad de moda, pendientes de la decisión del partido de Carles Puigdemont. La dirección nacional se inclina por el pacto anti-Orriols, mientras que en Junts Ripoll son partidarios de dejar que gobierne la lista más votada. ¿Cómo resolverán el entuerto?