La CUP da la espalda al 'mártir' Miquel Buch

El exconsejero de Interior en Cataluña Miquel Buch está siendo juzgado estos días por los presuntos delitos de malversación y prevaricación. Está acusado de haber facilitado protección con dinero público a Carles Puigdemont, cuando este ya había sido cesado por el 155. Buch ha recibido este miércoles el apoyo del procesismo en el arranque del juicio.

Como ya sucedió anteriormente con otros líderes del procés, los partidos han escenificado la solidaridad con el procesado en su llegada al tribunal. En esta ocasión había dirigentes de Junts, ERC y el PDeCAT, pero no de la CUP.

Tensa relación entre Buch y la CUP

A nadie se le escapa la turbulenta relación que mantuvieron el entonces consejero de Interior, Miquel Buch, y la formación anticapitalista. Los cupaires llegaron a pedir su dimisión por las cargas policiales en Girona, en diciembre de 2018. También solicitaron su comparecencia junto a Fernando Grande Marlaska por la actuación policial tras la sentencia del juicio del 1 de octubre.

Ahora, la CUP da la espalda a Miquel Buch mientras el resto de formaciones soberanistas lo convierten en un mártir de la causa. La plana mayor de Junts, encabezada por Jordi Turull y Laura Borràs, han acompañado al exconsejero. Por parte de ERC lo han hecho también la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell, y la candidata al Congreso Teresa Jordà.

También el PDeCAT ha querido mostrar su apoyo a Buch, y en su representación ha acudido el secretario de organización Genís Boadella. Todos han coincidido en que el juicio es una nueva persecución al independentismo.

Sigue el juicio contre el exconsejero

Nadie de la CUP ha acudido a respaldar a Buch ni ha habido ninguna expresión de aliento a través de las redes sociales. Una muestra del rechazo que aún sigue generando el exresponsable de Interior entre los anticapitalistas.

Mientras, sigue en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña el juicio contra Buch por la protección de Puigdemont. La cosa no ha empezado nada bien para el acusado, que ha visto como el mosso encargado de la investigación testificaba en su contra.

Toni Rodríguez, de la unidad de Investigación Criminal, cuestionó que el escolta Lluís Escolà cumpliera labores de asesoría e incluso denunció presiones políticas.