Carles Puigdemont confirma la caída a los infiernos de Laura Borràs
La confección de las listas enterrará definitivamente la lucha interna de Junts con el sector de Laura Borràs
Los partidos tienen que librar dos guerras: la interna y la externa. Y lo tienen que hacer armónicamente para que ninguna de las dos desestabilice a la otra. Es por esto que tienen la misma dureza con otros partidos que con sus propios miembros. En el caso de estos últimos, la dureza es incluso más despiadada. Para un partido, el orden interno es un requisito de funcionamiento.
Y Junts (por Cataluña y por Puigdemont) no es una excepción. Cualquiera que siga la política catalana está al tanto de que Junts ha librado una guerra interna entre dos sectores. Uno - en teoría - más posibilista, pragmático y encabezado por Turull y otro - también en teoría - partidario de la unilateralidad y encabezado por Laura Borràs.
Por su parte, el expresidente Puigdemont no se ha mojado. Pero, aunque no lo haya verbalizado, parece estar claramente alienado con el sector presuntamente pragmático de Turull. Las listas al Parlament serán la confirmación. Y todo apunta a que, además, serán una circunstancia perfecta para terminar la guerra con Borràs.
Gracias por los servicios prestados
Que Laura Borràs todavía esté en el puente de mando es solo figuración. A pesar de que una sentencia judicial le impide presentarse, el caso es que casi ninguno de sus aliados dentro del partido estarán en las listas. Cristina Casol está fuera de fuego y Aurora Madaula casi también, Alonso-Cuevillas se ha ido de la política y solo queda Francesc de Dalmases.
Por otro lado, las listas están bastante apretadas y la competencia es feroz. Además, Puigdemont compensa la carga política de las listas con figuras independientes como Anna Navarro. Con este panorama, es de esperar que el sector Borràs se diluya definitivamente y se ponga fin a esta guerra de desgaste. Todo depende de los resultados del doce de mayo.
Lo que está claro es que el expresidente ha optado por una estrategia electoral personalista. Por eso, el partido depende enteramente de su voluntad, aunque gran parte de la intendencia está delegada en figuras como Batet o Turull.
Por lo demás, suenan los nombres habituales de Josep Rius, Jaume Giró, Joan Canadell, Lluís Puig, etc. En este sentido, no es inverosímil que Puigdemont resucite a Jaume Giró para - como ha hecho con Anna Navarro - darle un perfil más sólido a las listas.
Más noticias: