Carles Puigdemont aprovecha la debilidad de Pedro Sánchez

Carles Puigdemont ha visto las costuras a Pedro Sánchez y quiere aprovecharse de ello.

Tras la defensa del ministro Albares del catalán en Europa y los piropos de Junts al Gobierno del PSOE, Waterloo vuelve a su tono habitual. El partido de Puigdemont pide la condonación de la deuda de Cataluña con el Fondo de Liquidez Autonómico. Pero no solo eso, cifra la "deuda histórica del Estado con Cataluña"  en 450.000 millones de euros.

Cataluña debe ahora mismo por préstamos del FLA unos 72.000 millones de euros al Estado y Junts quiere que la deuda se condone. Pero no solo eso, sino que será el Estado quién debería 450.000 millones a Cataluña en función de una deuda histórica desde 1986. Aquí Junts ya no pide que se pague, pero sí que propone una "cuota de solidaridad entre Cataluña como nación y el Estado" mientras la primera no consiga la independencia.

Junts per Catalunya lo ha hecho público en un comunicado tras las conclusiones de la Comisión de Estudio sobre la Deuda Histórica del Estado con Cataluña en el Parlament. Curiosamente, la formación de Carles Puigdemont ha decidido compartir sus propias conclusiones y exigencias 24 horas después de coquetear con Pedro Sánchez y su ministro de Exteriores.

La formación quiere poner sobre la mesa la cuestión económica tras pedir la amnistía y casi  tenerla ya confirmada y exigir la oficialidad del catalán en la UE. En este sentido, Junts quiere una agencia de Seguridad Social propia para Cataluña para poder gestionar un sistema propio de pensiones. 

Junts ve debilidad en el PSOE

No es de extrañar. Si ves que el Gobierno de Sánchez mueve cielo y tierra para que el catalán sea oficial y hasta enfada a gallegos y vascos, crees que aún puedes pedir más. Carles Puigdemont ya tiene casi segura su vuelta a Cataluña y ahora quiere empezar a negociar la cuestión económica. De momento también le ha pedido a Sánchez compensar todo aquello presupuestado durante sus años de presidente y que no se ha ejecutado. Si les sumas un sistema de pensiones propio y condonar la deuda del FLA, ya tenemos un posible acuerdo entre Junts y el PSOE.

No hay nada peor que la manca de fortaleza en política. Si además dependes de hasta seis partidos distintos para conseguir la investidura, todo se complica. Junts per Catalunya y Carles Puigdemont han visto una brecha y la quieren aprovechar.