La estrategia de Iñaki Urdangarin para seguir siendo novio de Ainhoa Armentia

Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia han demostrado que su relación es más fuerte de lo que muchos se pensaban. Su historia de amor está a punto de cumplir los dos años y han sabido capear el temporal que supuso la noticia de su romance.

Juntos han hecho frente a las adversidades y a las trabas que la infanta Cristina parece estar poniendo para formalizar el divorcio. El acuerdo no parece complacer al exduque de Palma, que intenta salir lo menos perjudicado en el asunto. Mientras tanto, Iñaki ha encontrado la fórmula para que su relación con Ainhoa no se resienta y se mantenga como el primer día.

Iñaki Urdangarin mantiene a Ainhoa fuera de las celebraciones familiares

Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia siguen creando expectación en los medios de comunicación. Aunque ambos procuran llevar una vida tranquila y relajada, los movimientos de la pareja son analizados con lupa.

Sobre todo porque el exjugador de balonmano todavía sigue casado con la infanta Cristina, con quien ya ha iniciado el proceso de divorcio. No obstante, se trata de un proceso largo que está impidiendo que Iñaki y Ainhoa puedan dar un paso más en su relación.

Cada uno vive en domicilios separados y así será hasta que Urdangarin quede totalmente desvinculado de su todavía mujer. Una situación que ha puesto al exduque de Palma en una delicada tesitura mientras intenta que su historia con Ainhoa no se resienta.

Pero para ello parece que Iñaki ha encontrado la manera de que esto no ocurra y que su chica permanezca a su lado. Y es que el secreto sería evitar que Armentia acuda a los eventos familiares que tengan que ver con sus hijos. Concretamente, aquellos en los que Pablo e Irene estén presentes.

Y es que son ellos dos los que peor estarían llevando la nueva relación de su padre y siguen sin aceptar a Ainhoa. Lo que podría acabar pasándole factura a la pareja si Urdangarin y Armentia se dejan ver juntos en algunas celebraciones familiares.

Esta gestión no resulta nada fácil, pero parece la única opción que, por ahora, ven viable. De hecho, seguro que Ainhoa lo entiende, ya que ella tiene el mismo problema con sus hijos. Solo los fines de semana en que los chavales están con su padre, Iñaki acude a casa de Ainhoa para pasar tiempo juntos.

Iñaki Urdangarin hace todo lo posible por estar junto a Ainhoa

Dado que sus respectivas situaciones familiares les impiden disfrutar del tiempo que les gustaría estar juntos, Iñaki y Ainhoa aprovechan las jornadas en el trabajo. Hace unos meses, ambos comenzaron a trabajar en la misma empresa, aunque en departamentos diferentes.

Esto les proporciona la oportunidad de compartir su día a día, lejos de las miradas escrutadoras de su familia. Además, tras la jornada laboral, aprovechan para tomar algo juntos y despejar la mente del trabajo.

Después, cada uno pone rumbo a su casa con la esperanza de que, dentro de poco, puedan vivir juntos. "El divorcio de Iñaki es la traba para dar ese paso, cuando se produzca darán ese paso juntos", explicaba Sandra Aladro en Vamos a ver.

Este será, sin lugar a dudas, un momento clave en su relación. Dado que vivirán juntos, la gestión familiar será mucho más complicada. Sobre todo para Ainhoa, cuyos hijos todavía no tienen edad para independizarse.

De ahí que estos ya hayan manifestado su deseo de vivir de manera indefinida con su padre para evitar compartir espacio con Urdangarin. La pareja, actualmente, sobrelleva la relación de la manera en que pueden mantenerse fieles a su amor. Un esfuerzo considerable si tenemos en cuenta las voces en contra que, desde el principio, han tenido Iñaki y Ainhoa.