Getty Images Más pensiones y más altas
La Seguridad Social tiene que pagar cada vez más pensiones y esto se traduce en impuestos y malos augurios sobre la viabilidad del sistema
Hay 126.000 nuevas pensiones con sus respectivas subidas que hay que pagar. Así lo indican datos oficiales de la Seguridad Social y la voluntad del gobierno de pagar más a los pensionistas. Hasta que deje de durar, las previsiones demográficas muestran que el sistema seguirá creciendo.
Las pensiones de los ‘boomers’: más impuestos
Se pone en marcha la incorporación progresiva de los ‘boomers’ al sistema de pensiones. En total, serán unas 15 millones de personas y el gobierno asegura que será sostenible: hacen previsiones hasta el 2032 e incluso hasta el 2050. Estas previsiones son cuanto menos sospechosas porque, entre otras cosas, dependen de factores que no pueden controlar.
Sea como fuere, hay cosas que ya sabemos: como que el número de pensionistas es el mayor en 10 años. Solamente esta incorporación de los nuevos representa 2.125 millones de euros en gasto. Y son estos datos los que justifican los recelos hacia la viabilidad de las previsiones que hizo Escrivà.
Recordemos que Escrivà se inventó el ‘Mecanismo de Equidad Intergeneracional’ (MEI), o sea, un impuesto. Consiste en una nueva cotización que se reparten el trabajador y el empresario. En teoría, este impuesto está destinado a financiar la famosa ‘hucha’ de las pensiones y, así, hacer viable la llegada progresiva de los ‘boomers’.
Dejando por ahora al margen que la ‘hucha’ es solo un apunte contable, los cálculos llevan a verle fallos a esta idea del MEI como garante del sistema ¿La razón?. Que solo los 126.000 nuevos pensionistas se gastarán el 76% de lo que recaudará el MEI.
¿Un parche en el sistema?
Es cierto que, como se suele decir, el impuesto ‘tiene truco’ porque el propio borrador contempla doblar su carga impositiva hasta 2029. Aún y así, hay multitud de voces - la CEOE y los actuarios, por ejemplo - que solo ven un parche en este impuesto. Porque si algo está claro es que esto se puede pagar o subiendo los impuestos o recortando los gastos.
Aunque sea para echar la pelota hacia adelante, los impuestos sí que suben, pero recortes no se esperan. Por ley, las pensiones están atadas al IPC y el IPC a las vicisitudes de la economía. Y es que, en realidad, la viabilidad del sistema de pensiones es un caso particular de la viabilidad del Estado, o sea, de la deuda.
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