Plano medio de Pere Aragonès y Carles Puigdemont, ambos posando sonrientes
POLÍTICA

¿Sánchez se los llevará al huerto?

Puigdemont aseguró una semana antes de las elecciones que no investirían al líder del PSOE

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, está tan preocupado por su eventual investidura que se ha ido de vacaciones… a Marruecos. La verdad es que Sánchez tiene la sartén por el mango. Y ha hecho oídos sordos a la petición de Feijóo de reunirse. Le ha dicho que sí pero que después de su toma de posesión.

Lo cierto es que Puigdemont anunció solemnemente una semana antes de las elecciones que no darían apoyo a Sánchez en una entrevista con Antoni Bassas, un periodista de confianza.

El expresentador de Catalunya Ràdio le preguntó: “Sánchez o Feijóo”. Y el expresidente, desde su residencia en Waterloo, lo dejaba claro: “Sánchez no será presidente con los votos de Junts”. El diario Ara, considerado próximo a Esquerra, lo publicó en portada.

También aseguraba que no le compraría al presidente del gobierno en funciones “ni un coche segunda mano”. Además, equiparaba el PSOE con el PP aunque el primero “opera con anestesia” y, en su opinión, el segundo no.

Primer plano de Carles Puigdemont enfadado

Pero desde las elecciones, Junts se ha mantenido en un discreto segundo plano a la espera de la oferta de Sánchez. La cabeza de lista, Míriam Nogueras, afirmó la noche electoral que “no me temblará en absoluto el pulso en continuar manteniendo la posición” y que “no haremos presidente a Pedro Sánchez a cambio de nada”.

Pero es evidente que las investiduras no salen gratis.

En cambio, la secretaria general d’Esquerra, Marta Vilalta, fijó tres condiciones en la su comparecencia el 24 de julio: referéndum de autodeterminación, acabar con el déficit fiscal y traspaso de Rodalies aunque ya se hizo uno en el 2010.

Junts exigiría, por su parte, el referéndum y la amnistía para los, en teoría, más de 4.000 encausados, una treintena altos cargos de la Generalitat lo cual facilitaría la inclusión de Puigdemont y el resto de huidos. Aunque una amnistía presenta problemas legales y judiciales porque ni siquiera ha sido juzgado.

En una entrevista con Jordi Basté en RAC1 el 6 de julio ya afirmó que “yo no me entregaré nunca, ni que me ofrezcan pasar solo un mes en prisión. La vía es la amnistía, una condición necesaria pero no suficiente”.

Imagen de Miriam Nogueras en la comparencia del 23-J en la sede de Junts per Catalunya

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, compareció precisamente el martes e instó a Pedro Sánchez a “mover ficha”. Aragonès recordó el Acuerdo de Claridad -que le tumbó el Parlament el pasado mes de septiembre- y un referéndum.

Mientras que para no dar la sensación de que los votos de Esquerra iban a salir gratis; la secretaria general, Marta Rovira, hizo unas declaraciones ayer en Cataluña Radio desde Suiza en al que afirmó que “nadie puede dar por descontados los votos de ERC”, también instó a “mover” a Pedro Sánchez hacia el referéndum y a recuperar la unidad independentista con Junts.

En el fondo, lo que dirimen ERC y Junts no es la investidura de Pedro Sánchez sino la hegemonía en el campo nacionalista con la vista puesta en las elecciones al Parlament dentro de dos años. Aunque Esquerra está claramente a la baja -en las municipales y las generales- y el PSC al alza.

Además, el referéndum de autodeterminación -en caso de que nunca se llegase a celebrar- tampoco es la independencia unilateral. Y tras la consulta del 1-0  el independentismo lo dio por bueno -incluido el Govern- y ya solo había que implementarlo.

¿Sánchez se los llevará al huerto?

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