Primer plano de Carles Puigdemont

POLÍTICA

Puigdemont pierde fuerza entre los suyos

Las negociaciones con el PSOE para la investidura de Pedro Sánchez desgastan la figura del expresident

Carles Puigdemont vive un momento de contrastes. Por un lado, su peso político se ha multiplicado gracias a la configuración del Congreso tras las elecciones del 23 de julio. Pedro Sánchez necesita los votos de Junts para seguir en Moncloa y esto le ha otorgado un protagonismo que había ido perdiendo poco a poco desde que se marchó a Bélgica. Por el otro, abrirse a facilitar la gobernabilidad del PSOE le está empezando a pasar factura entre los suyos, sobre todo en el Consell de la República.

Mientras Puigdemont se ha echado a la espalda las negociaciones con los socialistas, el inventó que ideó desde Waterloo empieza a desmoronarse. Su liderazgo dentro de Junts es prácticamente incuestionable, a pesar de que no sea ni el presidente ni el secretario general del partido. En cambio, ese mismo liderazgo en el Consell de la República empieza a perder fuelle.

Montaje con Carles Puigdemont visiblemente enfadado y Pere Aragonès sonriendo con el Parlamento de Catalunya de fondo

El Consell de la República nació con carácter transversal y con el objetivo de ser una especie de “gobierno en el exilio”. Se marcó también llegar a la cifra un millón de asociados. La realidad es que ha acabado siendo un instrumento que solo apoyan desde su partido (ERC y la CUP se desmarcaron del proyecto) y que cuenta con 90 000 socios (muy lejos del millón previsto inicialmente).

Los socios ‘pasan’ del Consell de la República

Este Consell de la República de Puigdemont vivió en los últimos días una votación para reformular los órganos internos de la entidad. Una votación que estuvo envuelta de mucha polémica y de la que ahora se han conocido los resultados. A pesar de que las bases han aprobado la propuesta de la cúpula de la entidad, la baja participación demuestra como Puigdemont va perdiendo fuerza entre los suyos.

Montaje manifestación independentista y Carles Puigdemont

Y es que tan solo el 6,53% de los socios decidieron votar en dicha consulta. La propuesta de la cúpula del Consell fue aprobada por el 76,5%, pero una participación tan baja solo evidencia que incluso los asociados ‘pasan’ cada vez más del invento de Puigdemont.

Cuestionan las negociaciones con el PSOE

Pero hay otra muestra más del cansancio de las bases del Consell respecto a la figura del expresident. Y es que un sector de socios decidió impulsar una consulta interna para cuestionar las negociaciones que Puigdemont ha iniciado con el PSOE. Esta consulta se ha iniciado este martes y durará hasta el día 23 de octubre.

Plano medio de Carles Puigdemont y Yolanda Díaz mirándose y sonriendo

La consulta en cuestión propone bloquear la investidura de Pedro Sánchez. Evidentemente no será una votación vinculante, ya que el Consell de la República no tiene potestad para frenar la voluntad de los partidos. Igualmente, también es muy difícil que gane la opción planteada por los díscolos. En cualquier caso, esta votación y la baja participación en el proceso de reforma de la entidad no dejan de ser un aviso a Carles Puigdemont. Y una muestra de que su figura ya no es incuestionable.

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