Europa Press La propuesta de Sílvia Orriols que haría tambalear la política catalana
Aliança Catalana recupera una medida de Javier Milei que ya reivindicaron el pasado marzo
La alcaldesa de Ripoll y diputada en el Parlament, Sílvia Orriols, se ha descolgado con una propuesta disruptiva. En un mensaje publicado esta semana, Orriols ha propuesto “retirar las aportaciones a los grupos municipales”. Es decir, cortar la financiación a los partidos.
Aunque se trate de un asunto a escala municipal, esta propuesta señala al centro del debate sobre los partidos. Como es sabido, los partidos viven fundamentalmente de subvenciones y de toda clase de partidas presupuestarias parlamentarias. Además de esto, las elecciones y campañas electorales son también un buen negocio para los partidos.
Orriols recibe insultos de la CUP por su propuesta | Europa Press
En Cataluña, el Parlament reparte cada año 9 millones de euros en subvenciones. De esta cantidad, 4,5 millones se reparten en función de los escaños. Los otros 4,5 millones se reparten en función de los votos.
Poco después de comunicar esta propuesta, Orriols ha explicado que no ha sido muy bien recibida. Desde la CUP, le han dicho que es una “rata”. Ante esto, Orriols ha calificado de ratas “a los que se creen con el derecho de repartirse las contribuciones de los ripolleses”:
Aunque ahora lo proponga la alcaldesa, esta medida hace tiempo que ronda por las mesas de Aliança Catalana. De hecho, es una medida que han copiado de nada menos que de Javier Milei.
Imitar a Argentina
Hace medio año, el presidente argentino explicaba en el parlamento de su país que iban a “eliminar el financiamiento público de los partidos políticos”. Con la contundencia que le caracteriza, el presidente argentino dijo que “cada partido tendrá que financiarse con aportes voluntarios”.
Esto gustó mucho a Jordi Aragonès, el principal ideólogo de Aliança Catalana. Así aplaudía Aragonès la medida del presidente Milei:
Esta clase de medidas suelen venir de partidos que nacen al margen del establishment y que operan en su contra. Aliança Catalana es un ejemplo de esto en Cataluña. A diferencia de Vox, AC sí que supone una grieta desde el interior del espacio independentista.
Sea como fuere, de llevarse a cabo en Cataluña una medida como la argentina, la política catalana experimentaría un cambio radical. Porque a todos los efectos la estructura política catalana (y española) depende de la financiación pública.
Si los partidos tuvieran que pagarse sus propios gastos se encontrarían ante un verdadero problema.
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