Europa Press, E-Noticies Podemos estrecha el cerco a Yolanda Díaz
Consultarán a sus bases sobre el acuerdo de coalición PSOE-Sumar
Todos los focos de la negociación por la investidura se centran en Junts. El PSOE sigue tratando de acercar posiciones con los independentistas catalanes para atar la legislatura. Pero mientras, hay otra derivada en la que apenas nadie se fija y que puede acabar siendo un serio problema para Pedro Sánchez.
Se trata de la guerra abierta entre Podemos y Sumar. Los morados no perdonan a Yolanda Díaz la purga desatada durante la conformación de la confluencia cuando el presidente del Gobierno convocó por sorpresa elecciones anticipadas. Desde entonces, las relaciones se han ido degradando de forma irreversible.
El partido de Irene Montero y Ione Belarra prepara una nueva ofensiva contra la dirección de Sumar. Consultarán a sus bases sobre el acuerdo de coalición entre el PSOE y Sumar para presionar a Yolanda Díaz. Los socialistas, que ya han visto el problema, han pedido a la vicepresidenta que ate en corto a los díscolos.
Objetivo, movilizar a las bases
En el PSOE son conscientes de que Pedro Sánchez va camino de ser presidente de un gobierno más dividido que nunca. La principal preocupación es Junts, no solo por la investidura sino también porque podrían tumbar al gobierno en cualquier momento. En este sentido, también hay inquietud con los cinco diputados de Podemos.
El PSOE teme que la guerra abierta entre Irene Montero y Yolanda Díaz le acabe estallando en los morros a Pedro Sánchez. Desde Ferraz ya han dado un toque de atención a Díaz para que apacigüe a los morados. Pero no lo tendrá fácil, a tenor de los pasos que va dando Podemos para debilitar su posición.
Irene Montero pasa a la ofensiva | GTRES
La consulta sobre el acuerdo de coalición es un intento de Podemos de movilizar a sus bases frente a los hechos consumados en Sumar. Quieren demostrar que en la anterior legislatura fue Unidas Podemos quien marcó el paso al PSOE. Y que con Yolanda Díaz, Sumar se ha sometido al PSOE y ahora son los socialistas quienes llevan la iniciativa.
Guerra abierta
El origen del problema y lo que más escuece en Podemos es el veto a Irene Montero para que los morados pudieran entrar en la confluencia. Como las elecciones se convocaron por sorpresa y apenas hubo tiempo, Yolanda Díaz lo aprovechó para no convocar primarias. Desde entonces, la líder de Sumar ha ido arrinconando a los diputados de Podemos para diluirlos en la amalgama de su partido.
El último desaire, la gota que ha colmado el vaso, ha sido dejar a Podemos sin portavocía en el Congreso de los Diputados. Los morados ya no tienen tan claro que vayan a seguir dentro de la confluencia. Si hay elecciones anticipadas, se plantean muy seriamente romper con Yolanda Díaz y presentarse por separado.
La incógnita es saber qué pasará si finalmente hay investidura y la legislatura echa a andar. Yolanda Díaz podrá consolidar entonces su posición. Los morados le han pedido que retenga Igualdad, pero los planes de la vicepresidenta son sacrificar este ministerio para conservar Trabajo y otras tres carteras en las que colocar a su gente de confianza.
Debate estratégico
Podemos acusa a Yolanda Díaz y a los suyos de autoritarismo, y su respuesta es consultar a las bases para marcar músculo democrático frente a Sumar. “Tenemos la responsabilidad de cuidar nuestra forma de hacer política, en equipo. Por esto hemos iniciado un proceso de reflexión y debate colectivo con el fin de fijar nuestra hoja de ruta para esta nueva etapa que comienza”, dicen desde la dirección.
Podemos ha convocado una conferencia política el 4 de noviembre para “recoger toda la inteligencia colectiva de las bases”. La ofensiva morada ha causado preocupación en Sumar, donde esperan que el arranque de la legislatura aplaque los ánimos. A la larga, nadie puede asegurar que los morados asuman su rol dentro de la confluencia.
Más allá de las rencillas personales, Podemos y Sumar chocan por la estrategia. Podemos acusa a Sumar de haber convertido el proyecto de la izquierda transformadora en una marca blanca del PSOE. En cambio, Sumar defiende la necesidad de abandonar la confrontación para construir una izquierda más amplia e integradora.
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