Jaume Asens, la 'celestina' que pretende unir a Sánchez y Puigdemont

“Llamemos a Jaume Asens”. Con esta idea, simple, pero con una enorme complejidad detrás, Jaume Asens volvió a la política un mes después de abandonarla. La orden de contar con Asens la dio Pedro Sánchez, presidente del Gobierno y candidato a la reelección, el 24 de julio de 2023.

Jaume Asens: un nombre que cotiza al alza

Lo hizo tras una conversación con Yolanda Díaz y la resaca de una derrota con sabor a victoria que cosechó el día anterior. Nunca perder unas elecciones había tenido un trasfondo tan dulce, con la inesperada posibilidad de reeditar el gobierno de coalición gracias al apoyo de nacionalistas e independentistas. En esta ocasión, sin embargo, se añadía un obstáculo extra al reto, ahora ya por todos conocido: la necesidad de contar con Junts per Catalunya.

Tras el fracaso en la investidura de Alberto Núñez Feijóo, esta semana ha recobrado el protagonismo un Pedro Sánchez que quiere revalidar la presidencia en el plazo de un mes. Ello requiere negociar con Sumar, ERC, PNV, BNG y Bildu, pero todas las miradas apuntan a Junts, cuyos votos son determinantes. La partida ha comenzado a jugarse de forma discreta, pero estará en el primer plano de la actualidad en las próximas semanas, con un nombre, el de Jaume Asens, será clave.

Jaume Asens, del adiós a la política a ser determinante en la investidura

Jaume Asens había abandonado la política el 16 de junio. Faltaban 24 horas para que su partido, los Comunes, aunaran sus votos con el PP para hacer alcalde de Barcelona a Jaume Collboni. Aunque se airearon discrepancias entre Asens y su partido por desbancar a Xavier Trias de la alcaldía, lo cierto es que nunca se produjo una contradicción pública.

Nacido en una familia de ideales catalanistas y republicanos, el bautizo político de Asens llega en la universidad. Es entonces cuando se afilia al Bloc d’Estudiants Independentistes (BEI), sindicato universitario de índole secesionista. Pese a ello, su paso a la política activa no llega hasta 2015, cuando es escogido concejal de Barcelona en Comú y ejerce como tercer teniente de alcalde en el primer mandato de Ada Colau como alcaldesa.

En 2019 es el número 1 de En Comú Podem en el Congreso y ejerce como presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos en la legislatura anterior. Asens fue uno de los puntales del partido en el plano parlamentario y se convierte en un referente negociador para el gobierno de coalición, desencallando la aprobación de muchas de sus iniciativas. La confianza de Pedro Sánchez en Asens se siembra, pues, en ese momento.

La legislatura anterior también permite su acercamiento directo con el entorno de Yolanda Díaz. Asens mantiene una muy buena relación con el exvicepresidente y exlíder de PodemosPablo Iglesias, pero su marcha no perjudica el peso relativo que tiene en su grupo. Jaume Asens logra consolidar su ascendencia gracias a ser un hombre de confianza de Ada Colau que, a su vez, forma parte del entorno más directo de Yolanda Díaz.

Como hombre de Colau, Asens entra con buen pie en su relación con Díaz. La vicepresidenta del Gobierno y líder de Sumar coincide con Sánchez el 24 de julio: Jaume Asens es la persona que debe mediar con Waterloo. Ambos conocen perfectamente su vínculo con el exconsejero catalán Toni Comín.

Jaume Asens, amigo íntimo de Toni Comín

“Jaume Asens es uno de mis mejores amigos desde hace años, de mucho antes que ni él ni yo nos dedicáramos a la política institucional. Hemos pasado muchos veranos juntos y, si la vida nos deja, pasaremos muchos más”. Son palabras, en Twitter, de Toni Comín, exconsejero del gobierno Puigdemont y actual eurodiputado de JxCat, además de mano derecha del expresidente catalán.

La relación de estrecha amistad entre Asens y Comín es pública y va más allá de la política. Después de declarar la independencia en el Parlament en 2017, medio gobierno catalán optó por salir de España: entre ellos, el entonces ‘conseller’ Comín. Tal y como él mismo ha contado, Comín toma la decisión de irse a Bélgica tras consultarlo con Asens que, además, le acompaña en el día en que abandona Cataluña.

Es el propio Asens quien recomienda a Comín el abogado Gonzalo Boye. Una amistad personal, en definitiva, más que demostrada en los últimos años, también con las frecuentes visitas de Asens a Lovaina, la localidad belga donde reside Toni Comín. Cabe recordar la crítica de Gabriel Rufián a Asens cuando, en 2022, le espetó que “no fuera tanto a Waterloo”; unas palabras que causaron una guerra interna —otra más— en el seno del independentismo.

Asens, la bisagra perfecta entre Moncloa y Waterloo

La posición de Asens en la negociación Moncloa-Waterloo es, pues, de un encaje prácticamente ideal. La confianza de Sánchez y Díaz, por un lado; y la amistad con Comín —mano derecha de Puigdemont en Bélgica— dejan a Jaume Asens como la bisagra imprescindible entre ambos bandos. Hace unas semanas ya estuvo en el Parlamento Europeo, en el encuentro entre Yolanda Díaz y Carles Puigdemont al cual asistió también Toni Comín.

La negociación para la investidura, que conllevará la elaboración de una ley de amnistía, se antoja extraordinariamente compleja. En este contexto, Asens no deberá valerse tan solo de su posición de confianza entre ambas partes.

Su experiencia en el mundo jurídico y parlamentario y su capacidad negociadora serán otras de las claves de las próximas semanas. El propio Asens mostraba cierto optimismo, esta misma semana, por las últimas declaraciones hechas por Puigdemont en referencia a la investidura.

Tras ocupar puestos de primera línea en el Ayuntamiento de Barcelona y en el Congreso de los Diputados, Asens, ahora alejado de los cargos institucionales, cobra un protagonismo inédito. En las próximas semanas sabremos si saca partido de su posición clave o si, pese a una situación idónea entre las dos partes enfrentadas, no logra el acuerdo. En juego, el Gobierno… y una amnistía.