Marta Rovira anuncia que se queda a vivir en Suiza y las redes estallan
Los ‘indepes’ vuelven a la carga contra la última estafa procesista: ‘Vengo, pacto con Illa y me voy’
La exsecretaria general de ERC y archienemiga de Oriol Junqueras, Marta Rovira, no vivirá en Cataluña. Solo un día después de que Junqueras se quedara a las puertas de ganar el congreso de ERC, Rovira anunciaba que se quedaba a vivir en Ginebra. Después de una residencia de 6 años en el país transalpino, la dirigente de ERC ha decidido continuar su vida allí.
Esta decisión solo responde a motivos personales porque la amnistía ya le permitía residir en España y moverse con libertad. Según ha trascendido, Rovira habría explicado a su círculo más cercano que tiene la posibilidad de trabajar en organismos internacionales. Así mismo, su pareja sentimental ha desarrollado su carrera laboral allí y la hija de ambos cursa la escolaridad en Ginebra.
Y como tantos otros procesistas, si Rovira había escogido Suiza como país de residencia era para eludir la acción de la justicia española. Esto también lo hicieron, por ejemplo, Ruben Wagensberg (ERC) o Anna Gabriel (CUP). De hecho, Anna Gabriel también decidió residenciarse en Suiza después de conseguir la dirección y secretaría general de un sindicato suizo, UNIA.
Intentar enterrar a Junqueras y vuelta a Suiza
La decisión de Rovira contrasta con el boato que se le dio a su vuelta a Cataluña, ocurrida el pasado 12 de julio. Además de una gran cobertura mediática, aquellas fechas estuvieron marcadas por la intensa actividad política de Rovira. Junto a las negociaciones con el PSC y las maniobras para convencer a la militancia, Rovira dijo que regresaba “para terminar la faena”.
Con la perspectiva del tiempo, parece que la “faena” consistió en evitar a cualquier precio una repetición electoral, pilotar la sucesión de Aragonès e intentar tumbar a Junqueras. En este sentido, todos recordarán los amargos episodios que protagonizó el partido durante aquellas fechas. Ahí está, por ejemplo, el descubrimiento de “la B”, de la guerra sucia, de los carteles del Alzheimer o de los perfiles falsos para atacar a los adversarios.
Las reacciones
Después del anuncio de Rovira, las redes sociales se han llenado de usuarios independentistas que vuelven a mostrar su indignación ante los engaños de la élite procesista. Son muchos los que recuerdan con incredulidad el espectáculo que se dio cuando Rovira volvió a Cataluña. “Lo de Marta Rovira volviendo del “exilio” en Suiza solo para entregar activamente la Generalitat al 155 y luego volver a irse... no lo veía venir”, comentaban los usuarios en X.
Asistimos, en fin, a otro ejemplo del derrumbe procesista, que además de un fracaso político también ha sido un fracaso social. Y es que, a excepción de algunos casos, muchos dirigentes procesistas han optado por beneficiarse de la amnistía y pasar a un discreto segundo plano. Y los que no lo han hecho, como Puigdemont o Junqueras, quieren presentarse como la “renovación” del independentismo.
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