Y Laura Borràs pasó por el aro

Anna Erra (Junts) será elegida este viernes con toda seguridad presidenta del Parlament de Catauña. ERC votará a favor para respetar el acuerdo de investidura (la Presidència para ellos, el Parlament para Junts). Y la CUP se abstendrá para impedir una presidencia del PSC. 

Junts confirmó ayer la candidatura de la alcaldesa de Vic Anna Erra a la presidencia del Parlament, en una reunión extraordinaria en la sede del partido. Erra representa al sector institucional de Junts, opuesto a la línea Borràs. De hecho, su candidatura se ha impuesto a los candidatos alternativos que manejaba la presidenta saliente, Laura Borràs.

Erra y Borràs trataron de escenificar la unidad llegando juntas a la sede del partido ayer por la tarde. La imagen tiene un profundo calado. Supone la sumisión definitiva de Borràs ante el sector moderado, liderado por Jordi Turull y reforzado por la reciente victoria de Xavier Trias en Barcelona, a cambio de seguir como presidenta del partido. 

Recordemos: Borràs, con juicio oral abierto por supuesta corrupción, fue suspendida del cargo en julio de 2022 con el beneplácito de ERC y la CUP. La hasta entonces presidenta del Parlament, azote de ERC e instigadora de la salida de Junts del Govern, ha perdido también el apoyo de un amplio sector de su partido. El que representa Jordi Turull, partidario de reconstruir puentes con Esquerra, y que ahora escenifica su hegemonía.

Borràs evita la confrontación

Según Vilaweb, periódico cercano al sector de Borràs, la presidenta saliente asume ya que su peso cada vez es menor. De hecho, en la reunión de ayer habría facilitado un relevo sin confrontación a cambio de seguir como presidenta de Junts.

Todos los candidatos que manejaba Borràs se habían descartado o no contaban con las suficientes garantías de consenso. Consciente de su posición, la “hija del 1 de octubre” acabó cediendo y ella misma propuso a Anna Erra como su relevo. Lo contrario habría significado abrir un nuevo enfrentamiento interno que le habría podido acabar constando la presidencia del partido.

Consenso antes del 23J

Turull y Borràs refuerzan así el consenso dentro de la formación antes del 23J. Ya sin representación en ningún espacio institucional, Laura Borràs se aferra al cargo de la dirección del partido como un clavo ardiendo. El ascenso de Erra, no obstante, certifica su declive y apuntala la hegemonía del sector institucional de Junts.

La confirmación de Míriam Nogueras (la candidata de Puigdemont y Turrull) para el 23J, pero sobre todo la victoria de Xavier Trias en Barcelona, aclaran los equilibrios dentro de Junts definitivamente. Y a Laura Borràs no le queda más remedio que pasar por el aro.