La Junta Electoral para los pies a TV3 tras incumplir la neutralidad

La denuncia de Ciudadanos ha prosperado. A petición del partido naranja, la Junta Electoral de Barcelona prohíbe a TV3 y a Catalunya Ràdio hablar de “exiliados” durante la campaña electoral. Ciudadanos entendía que se trataba de una vulneración del deber de neutralidad informativa de la cadena pública.

De hecho, hoy mismo, Carlos Carrizosa ha tenido un desencuentro con Xavier Grasset a propósito de este asunto. El líder de Ciudadanos le ha entregado en directo la resolución de la Junta Electoral y el presentador le ha leído la definición de ‘exilio’ en el diccionario.

Denuncia de C’s

La denuncia presentada por Ciudadanos hablaba de que el tratamiento informativo de TV3 “adoptaba el discurso de las candidaturas independentistas”. Después de analizarlo, la autoridad electoral ha concluido que es así.

“Incumple los principios de neutralidad informativa exigibles a los medios de titularidad pública en periodo electoral y favorece unos determinados posicionamientos ideológicos en detrimento de otros”, dice la resolución oficial.

Así mismo, la Junta Electoral habla de “relato unívoco” y señala que no se ofrece “una versión diferente de la relatada para que el espectador pueda comparar diversas percepciones de los hechos y de la situación jurídica de los afectados”. En esencia, que al hablar de ‘exiliados’ TV3 solo daba voz a una de las partes.

Segundo toque de atención

Con respecto a TV3, una de sus últimas polémicas políticas fue el anuncio de la histórica inversión de 1.347 millones de euros hasta 2027. Una inversión que la convierte - y con mucha diferencia - en la televisión autonómica mejor dotada de toda España. La oposición acusó al Govern de ERC de invertir en “gasto identitario”.

Por lo demás, este no es el primer toque de atención de la Junta Electoral. Hace muy poco, le señaló al presidente Aragonès que había hecho su anuncio de una propuesta de financiación singular para Cataluña durante la precampaña. Fue el PSC el que lo denunció.

Con otras palabras, la Junta Electoral vino a decir que lo que había explicado Aragonès no tenía ninguna fuerza institucional. “Parece más el anuncio de un programa futuro que de un acuerdo gubernamental de aplicación inmediata, de tal manera que está más en la línea de aquello que las formaciones políticas concurrentes a las elecciones presentan como programa electoral”.