La izquierda catalana recupera los escraches contra los que no piensan como ellos

Bajo el paraguas del “antifascismo”, ciertos grupos de izquierda cercanos al entorno de la CUP han protagonizado ya varios escraches durante la campaña electoral. Además, contra opciones políticas muy diferentes entre sí: desde ERC hasta Aliança Catalana y pasando por Junts y S’ha Acabat.

Por lo general, se trata de grupos minoritarios y con simpatías antisistema que aprovechan la visibilidad de actos ajenos para hacer sus reivindicaciones. En ocasiones, son grupos que han sido alimentados desde las propias instituciones, como le ocurrió el pasado fin de semana al consejero Elena. El Sindicato de Vivienda del Raval reventó un acto de ERC para acusar a los republicanos y al consejero de “ser los responsables directos de la miseria de los trabajadores de esta ciudad”.

De la misma manera, un grupo de activistas reventó ayer un acto de Junts en Vilafranca del Penedès para pedir la libertad del activista Adrián Sas. “Lástima que no hemos podido hacer al acto”, se lamentó después en redes Jordi Turull, “no seremos nosotros los que no respetaremos o impediremos el derecho de protesta”.

También Aliança Catalana y S’ha Acabat

Pero no solo Junts y ERC han visto como algunos de sus actos electorales para el 12M se malograban por estos grupos. Plataformas como S’ha Acabat o partidos como Aliança Catalana también han sufrido escraches.

Ayer, la Unidad Contra el Fascismo y el Racismo (UCFR) explicaba en redes sociales que habían tenido una “tarde antifascista” que consistió en impedir un acto de S’ha Acabat - “los jóvenes fascistas de Vox y Sociedad Civil Catalana” - y en acosar a una parada informativa de Aliança Catalana - “los fascistas de la estelada” -. Todo ello, en la ciudad de Terrassa.

UCFR es uno de los entes habituales de la “lucha antifascista” en Cataluña. Según explican ellos mismos, tienen como objetivo luchar contra los “discursos de odio, racismo, fascismo, islamofobia y misoginia”. Hace unas semanas, por ejemplo, acusaron también al Colegio de Periodistas de Cataluña de dar voz a la extrema derecha por haber cedido sus instalaciones al Front Nacional de Catalunya.

La reacción en redes ha sido unánime y devuelven la acusación de fascistas a la UCFR. “Lo mejor de todo esto es que demostráis una vez más que los fascistas sois vosotros” o “Si algún día os encontráis fascistas de verdad tal vez entenderéis qué es el fascismo”, decían algunos. Aunque la pregunta capital era la que planteaba un usuario: “¿Podéis definir el fascismo?”.