Giro inesperado en el caso de la condena a una persona por comentarios 'tránsfobos'

Novedades en el caso de la condena a una mujer por comentarios tránsfobos contra una mujer trans. Ahora se ha sabido que la condenada también era una mujer trans. De hecho, la polémica vino por ahí: la ya condenada acusaba a la otra de no ser una verdadera trans por no haberse operado - como ella sí hizo - los genitales.

Esta sentencia se presentó como pionera por ser la primera que condenaba comentarios tránsfobos. Varias figuras y entidades afines a las cuestiones queer presentaron el asunto como un éxito contra el feminismo terf. De hecho, y además de lo anterior, se remarcó que la condenada era votante de Vox e incluso se hicieron memes al respecto.

Condena penal

Lo explicábamos ayer mismo en E-Notícies: “prototipo de maricón con tetas”, este era uno de los insultos por los que una “mujer cis”, según remarcó Carla Antonelli, fue condenada por los juzgados. La primera condena penal por delitos de esta naturaleza. La acusada aceptó los hechos y pagar 3.850 euros.

Esta situación fue presentada como un éxito por parte de grupos queer. Más concretamente, como un éxito contra el llamado feminismo terf o feminismo radical. En este sentido, la prensa de corte progresista explotó el hecho así como la cercanía de la condenada con el partido Vox. Esta misma mañana, el medio ElDiario ha actualizado la noticia que hizo al respecto.

La condenada - cuyo identidad no ha trascendido - al parecer conocía a la víctima, Violeta Ferrer Micó, ex-prostituto y transactivista. En sus redes sociales comparte sus ideas y reivindicaciones e invita a actividades como la “putivuelta trans”, que hace un repaso de la prostitución por Barcelona.

Pues bien, todo este relato en torno a lo sucedido ha sufrido un vuelco cuando se ha sabido que la condenada también era una mujer trans. Precisamente, sus comentarios contra Ferrer Micó iban en la línea de que esta última no se había operado los genitales y que, por lo tanto, no era una “auténtica mujer”. De aquí que ahora haya quedado contextualizado el comentario de “no soporta que yo sea mujer y me tiene una inquina patológica”.

De esta manera, la pionera sentencia contra comentarios tránsfobos ha resultado ser contra otra trans. Concretamente, entre dos varones que se autoperciben como mujeres. Por el momento, algunas de las figuras que comentaron el asunto en redes - Carla Antonelli o el despacho de abogados Olympe - no han dicho nada más al respecto.