Un hombre con gafas y chaqueta oscura participa en un programa de televisión sobre educación, con una estantería llena de libros al fondo.
POLÍTICA

La Fundación Bofill culpa a la ‘desigualdad’ del fracaso escolar en Cataluña

El mayor lobby educativo catalán no se sale del guion: piden más recursos y más financiación

Una de las características del relato progresista es que todo se reduce a las condiciones socioeconómicas. La inseguridad es un ejemplo reciente: desde la izquierda, insisten en que el aumento de la inseguridad está ligado a las malas condiciones de vida. Este comodín es muy valioso para el progresismo porque le permite señalar siempre al mismo factor.

Y además de la inseguridad, el otro gran ejemplo es la educación, que es un tema de gran actualidad en Cataluña. Después del sonoro fracaso en los últimos informes educativos, las voces progresistas vuelven a poner el acento en la financiación y en los recursos. El último ejemplo nos lo ha dado la Fundación Bofill, unos de los lobbies responsables del fracaso educativo.

Una alumna atiende durante una clase semipresencial de Matemáticas impartida por la jefa de Estudios, Celeste Molinero a alumnos de 4º de la ESO en el Colegio Ábaco, en Madrid (España)

En una intervención en TV3, el jefe de proyecto de la Fundación Bofill, Miquel Àngel Alegre, ha repetido este guion. Según ha explicado, la causa fundamental del fracaso educativo son las cada vez mayores “desigualdades sociales”.

Y ante la pregunta de si la “metodología” también es otro factor explicativo, Miquel Àngel Alegre ha dicho que él es “escéptico”. “Claramente, se ve una relación muy fuerte entre cómo caen los resultados y cómo crecen las desigualdades educativas y cómo se hace más compleja la realidad del alumnado”, ha concluido Alegre:

Más dinero, más recursos

Ante los últimos informes educativos, es evidente que la Fundación Bofill se ha replegado en su discurso. Y en su anuario del año 2024 - un “antídoto contra las visiones catastrofistas”, dicen - vuelven a poner toda la responsabilidad en los recursos. De este modo, piden más horas para los alumnos con bajo rendimiento, 600 tutores de acogida más y 5.000 profesores nuevos.

Y ante la realidad de que el Departamento de Educación ha aumentado en un 37% los recursos durante los últimos años, la Fundación Bofill dice que este aumento no se ha dado de manera “equitativa”. Estas explicaciones no han gustado nada a la nueva voz crítica con el sistema educativo, Damià Bardera. Y a través de redes sociales, Bardera ha criticado las últimas ocurrencias de Bofill. "Sois una vergüenza, sois parte del problema", ha dicho:

Y entre el resto de usuarios tampoco ha habido una buena acogida a estas declaraciones de la Fundación Bofill. Son varios los docentes que dicen que parte de la solución pasa por desterrar a la Fundación del sistema educativo catalán. 

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