El entorno de Carles Puigdemont vuelve a la carga contra Catalunya Ràdio

A Junts le duele la pérdida de poder y penetración institucional. Al fin y al cabo, la plataforma sobre la que se sustentaba su poder político era la Generalitat y todo lo que de ella pendía.

En realidad, esto no es más que el resultado de haber perdido la mayoría en el Parlament y de que la unidad independentista no haya sido nunca efectiva. Basta observar las relaciones entre ERC y Junts para comprobar que cada partido intenta salvar su parte del negociado.

Y en particular, a Junts parece molestarle con especial intensidad la pérdida de influencia mediática.

Esto les ha llevado a criticar una obviedad política como que los partidos que llegan al poder ponen a sus afines en determinados cargos, que es lo que ha ocurrido con Cristina Farré, nueva directora de comunicación del Govern. De la misma manera, también se alegran si Salvador Illa obtiene unos malos resultados de audiencia en una entrevista en TV3.

El último ejemplo de juntaire sorprendido ante el cambio de rumbo de Cataluña ha sido Neus Torbisco.

Las cosas cambian

Profesora de la Universidad Pompeu Fabra, Torbisco fue una de las más perjudicadas por el mal resultado de Junts en las elecciones europeas. El motivo es que ella iba de segunda en las listas y Junts solo obtuvo un escaño, que fue para Toni Comín.

Pero el caso es que Torbisco se ha mostrado muy airada en redes sociales ante la nueva composición de la tertulia de los martes del programa El matí, de Catalunya Ràdio. Algunos de los tertuliano serán Anna Grau, Sergi Sol o Montserrat Nebrera, entre otros. Como es evidente, esta nueva tertulia habría sido impensable hace unos años, cuando el procesismo sí controlaba la Generalitat.

Por su parte, a Neus Torbisco le ha entrado ahora el deseo de imparcialidad en los medios públicos catalanes. En un mensaje publicado en redes sociales, ha valorado la nueva composición de la tertulia y ha denunciado que “este nivel de desinformación, sectarismo y superficialidad no neutral financiado públicamente es injustificable”:

En los comentarios, algunos seguidores de Junts también parecen sorprenderse ante el hecho de que su partido ya no controla todos los altavoces mediáticos. Otros usuarios, en cambio, denuncian que durante años los medios públicos catalanes solo tenían una determinada orientación política por todos conocida.