La Cataluña de los 8 millones de Pere Aragonès: 'La menos catalana'

Pere Aragonèsha abierto el debate de política general de Cataluña con un discurso de más de dos horas. En él, el president ha lanzado algunas de las ideas que deberían marcar el curso político catalán. Se trata de la amnistía, un acuerdo para un referéndum y avanzar en la "Cataluña de los 8 millones".

Aragonès ha repetido muchas veces el concepto de los "8 millones", que le ha servido para trazar la Cataluña que ERC y su Govern se imaginan. Ha sido la única referencia a la inmigración que ha hecho el president de la Generalitat. Para él, la actual Cataluña es "la más diversa, orgullosa de ser como es, abierta al mundo, avanzada, dinámica, emprendedora, la que piensa a lo grande y la que se quiere más justa, verde, feminista, próspera y plenamente libre".

Para Esquerra, pues, no existe ningún problema de convivencia ni seguridad. Algo que no todos los catalanes comparten. 

El portal 324.cat compartía este mismo instante del discurso del president Pere Aragonès. Los seguidores del perfil de la cadena pública catalana no han tardado en mostrar su disconformidad con el concepto de la Cataluña de los "8 millones".

"Todo esto que dice son imaginaciones suyas la realidad es que la Cataluña de los 8 millones ahora mismo está fuera de control". "Tan diversa que ya no puedes hablar tu idioma materno". "Son tan feministas que entran desde el norte de África". "Más inseguridad que nunca, pueblos enteros convertidos en guetos, el catalán en extinción, se llaman feministas, pero defienden el velo islámico… y podría seguir". "La Cataluña menos catalana".

Son tan solo algunos de los comentarios a las palabras de Pere Aragonès. 

La única receta para la integración de Pere Aragonès: el catalán

La "Cataluña de los 8 millones" implicaría en cualquier otro país políticas de integración, de convivencia o de control de fronteras. En su intervención, Pere Aragonès tan solo ha dado una receta a su "diversidad": la lengua y la cultura. Para el Govern de ERC, no habrá problemas de seguridad ni de integración si se destina más dinero a la cultura y a la lengua catalana.

Mientras tanto, el debate sobre el control de la inmigración y la seguridad está más al orden del día que nunca entre ciudadanos de Cataluña. Solo hace falta echar un vistazo en redes.