Las agresiones sexuales se han doblado en un año en Gerona

Los nuevos datos de criminalidad del Ministerio de Interior, correspondientes al primer trimestre de 2025, muestran una realidad preocupante. Mientras que algunos delitos bajan, las agresiones sexuales se disparan. Gerona es una de las ciudades donde más ha crecido este tipo de delitos, que en un año se han doblado.

La violencia sexual contra las mujeres se ha incrementado de forma general en toda la provincia de Gerona. Los delitos contra la libertad sexual han crecido un 50%, y las violaciones un 140%. En Gerona ciudad, pese a que los delitos han bajado un 5%, los delitos contra la libertad sexual han crecido un 114% y las violaciones un 100%.

Entre enero y marzo de 2024 hubo 4 violaciones en la ciudad de Gerona, mientras que en el mismo período de este año ha habido 8. Los delitos contra la libertad han pasado de 14 a 30 en un año. 

Figueres es otra ciudad de la provincia de Gerona con un incremento importante de la violencia contra la libertad sexual. En un año los delitos de esta tipología han pasado de 5 a 14, lo cual supone un aumento del 180%. Las violaciones en esta ciudad han pasado de 0 a 5. 

También se han doblado las violaciones en Blanes, mientras que los delitos contra la libertad sexual han aumentado un 125%. Datos similares a los de Lloret de Mar, con un aumento de los delitos sexuales (133%) y el doble de violaciones. En Olot y en Roses también se han doblado las violaciones, lo cual resulta altamente preocupante.

Aumentan las violaciones en Cataluña

Gerona es un caso pronunciado, pero no aislado del incremento de las agresiones sexuales. En Cataluña las violaciones han aumentado un 26%, pasando de 332 a 421 en un año. En la provincia de Barcelona han crecido un 22,4%, por un 31,1% en la provincia de Lérida. La provincia de Tarragona es la excepción, con un descenso del 5,4%.

Estos datos reflejan el fracaso de las políticas de protección de las mujeres, pese a haber tenido la consejería más feminista de la historia. Este aumento debe cruzarse también con los datos del Departamento de Justicia, y esto abre un debate incómodo.

Según estos datos, la mayoría de los presos condenados por agresión sexual en las cárceles catalanas son extranjeros. Esto respalda el argumento de partidos como Vox y Aliança Catalana, que vinculan el aumento de la inseguridad con el incremento de la inmigración. También pone contra las cuerdas a la izquierda, que defiende el feminismo pero esquiva esta realidad.

Tampoco es baladí que la zona donde más aumentan las agresiones sexuales sea en una de las dos ciudades gobernadas por la CUP. Una cosa no va relacionada con otra, pero obliga a la izquierda a revisar las políticas de seguridad pública.

Más allá de las percepciones

Estos datos reflejan también la necesidad de reforzar la seguridad en las calles de Cataluña. Se ha demostrado que la inseguridad no son simples percepciones, como decía la izquierda, sino una realidad que sufren diariamente los ciudadanos. La consejería de Interior ha hecho un cambio de mentalidad en este sentido, que ahora debe traducirse en datos.

Las encuestas respaldan tanto las percepciones como los datos del incremento de los delitos sexuales contra las mujeres. La última encuesta de la Generalitat arrojó que más de la mitad de las mujeres en Cataluña han cambiado sus hábitos por miedo a ser víctimas de un delito. En muchos barrios de grandes ciudades,aseguran tener miedo de salir a la calle a ciertas horas.