Europa Press Ada Colau se aferra a su silla
Tras quedarse sin ministerio en el nuevo Gobierno, la exalcaldesa de Barcelona también pierde a su posible sustituto al frente de los Comuns. Su futuro está en el aire, a la espera de las negociaciones con Jaume Collboni
En 2019, Ada Colau perdió las elecciones, pero gracias a los votos de Manuel Valls pudo revalidar su puesto como alcaldesa. En 2023, las urnas le volvieron a dar la espalda y no tuvo más remedio que ceder sus votos a Jaume Collboni para evitar que Xavier Trias se hiciera con las riendas del Ayuntamiento.
A pesar de sus esfuerzos para hacer un “pacto progresista” con PSC y ERC, por el momento Collboni no se mueve. No tiene prisa. Y más ahora que el panorama político le permite mirar tanto a BComú como a Junts para conformar un gobierno estable en la capital catalana.
Más complicada es la situación de Ada Colau tras quedarse sin ministerio. Ella dice que renunció a ello, aunque nunca sabremos si realmente fue así o llegó a ser vetada por Junts en las negociaciones por la investidura de Pedro Sánchez. El caso es que ahora, la exalcaldesa se está quedando sin opciones. Las salidas que tiene son, por un lado, intentar pactar con el PSC y seguir instalada en las instituciones cuatro años más. También puede quedarse en la oposición durante todo el mandato. O, también, dar por finalizada su etapa como política profesional.
Collboni tiene en su mano el futuro político de Ada Colau | E-Noticies
Por el momento está optando por aferrarse a su silla, eso sí, en la oposición. Desea -y así lo ha remarcado en público en numerosas ocasiones- entrar a formar parte del gobierno Collboni como socia minoritaria. Pero no está claro que el actual alcalde acceda a ello. Primero, porque ya podría haberlo hecho. Y segundo, porque los primeres meses del mandato de Collboni se han caracterizado por distanciarse de algunos de los proyectos estrella de Colau.
Además, hay otra cuestión a tener en cuenta. Colau, ahora mismo, no tiene un relevo claro dentro de los Comuns. Uno de los más bien posicionados era Jordi Martí, pero se ha ido de número 2 de Ernest Urtasun al ministerio de Cultura. El único rostro con capacidad de poder sustituirla es Janet Sanz, histórica dirigente de Iniciativa per Catalunya y política profesional, que ha tenido sus más y sus menos con Colau.
La incertidubre dentro de su partido y las posibilidades abiertas en los pactos que en algún momento debe afrontar Jaume Collboni han provocado que Ada Colau, de momento, apueste por agarrarse a su sillón.
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