Los cinco mejores desayunos de tenedor de Barcelona

En Barcelona, como en todas partes, hay gente que un desayuno ligero para empezar la mañana no les es suficiente para ponerse las pilas. Siendo la comida más importante del día, ¿para qué limitarse a unos cereales y una fruta? Un buen desayuno de cubiertos suele ser el comienzo del día de muchos trabajadores o gente que se da un lujo los fines de semana.

No obstante, a no ser que te apetezca cocinar por la mañana, lo mejor es optar por visitar algún local que ofrezca algo más que un bocadillo por la mañana. Y aunque a muchos nos vendrán ejemplos de establecimientos rurales para ello, en Barcelona hay propuestas para aburrir.

Bar Sant Josep

Situado en la calle Saragossa, 33, se encuentra el bar Sant Josep Esmorzars de cullera, Pepo Mesa Luque y Montserrat Esteve llevan 18 años satisfaciendo estómagos que rugen por la mañana. 

El propio nombre ya ofrece una pista de cuál es la especialidad de la casa, ofreciendo platos como callos, fricandó, codillo o carrillera, entre otros. La comida es de calidad y a un precio asequible que, junto a un trato familiar, ofrecen una buena experiencia mañanera a sus clientes.

Ultramarinos Marín

La siguiente propuesta no se queda atrás. Situado en la Calle Balmes, 187, se encuentra el restaurante Ultramarinos Marín con una oferta bien variada de platos combinados. Chistorra, rubia gallega, conejo a la brasa, 'capipota', huevos fritos o judías al Ganxet son algunas de las delicias disponibles.

No obstante, sus tostadas acompañadas de panceta, mantequilla u otros manjares no se pueden infravalorar. Una visita obligada que tan solo darán ganas de repetir.

Morning brasa

La familia 'Tramendu' cuenta ahora con un tercer establecimiento. Si ya contaban con una vermutería y un restaurante en Barcelona, ahora se les suma una brasería en la calle Parcerisa, 11. Con una apuesta por la cocina tradicional catalana y un aspecto de vieja masía, solo falta un contundente plato a la altura de las expectativas.

Butifarra con judías, oreja de cerdo o carrilleras acompañadas de todo el alioli que gustes a una mañana de viernes o sábado, un paraíso de los placeres simples del ser humano. Se trata de un festín de proporciones astronómicas hecho para los más valientes.

Bo de Bernat

Y continuamos con el Bo de Bernat, localizado en la calle Urgell, 27. Se trata de la propuesta más joven de la lista, ya que este mes de julio cumplirá dos años. Su fundador, Bernat Dalisay, fue cocinero del Gelida, convirtiéndolo en todo un maestro de la cocina catalana.

En las pizarras ya se hace notar, con probablemente una de las cartas más extensas que hay. Guisos, carne a la brasa, pescado, tortillas… todo de calidad y recién hecho. Y además, a unos precios de derribo.

Granja Elena

Y para terminar hacemos un poco de trampa y, en vez de hablar de un plato de comida de tenedor como tal, hablaremos de bocadillos. Pero, es que es lugar que os vamos a proponer hace bocadillos que son dignos de considerarse un desayuno de tenedor.

En el paseo de la Zona Franca, 228, se encuentra Granja Elena, un lugar donde ofrecen más de una cuarentena de bocadillos planchados distintos que están de muerte. Además, aparte de bocadillos, también te puedes zampar unos huevos fritos, callos o tortillas que se derriten en tu boca.