Jarro de agua fría para Eva Martín por lo que inesperadamente ocurre en 'La Promesa'

Un nuevo desaire de Jana provoca la ira de Cruz, personaje de Eva Martín. Este lunes 18 de noviembre a las 17:30h, los espectadores pueden seguir disfrutando de un nuevo capítulo de 'La Promesa' en La 1. Se trata de la serie protagonizada por Ana Garcés, Arturo García Sancho, Eva Martín y Manuel Regueiro.

Recordamos que, en el capítulo anterior de 'La Promesa', tras un recibimiento digno de una reina por parte de la familia Luján, Jana ya se instaló en la zona noble. Sin embargo, la antigua doncella aún no se sintió preparada para asumir su nueva vida y apenas abandonó su nueva habitación.  El robo del crucifijo trascendió y los empleados se dispusieron a buscarlo sin que María Fernández se atreviese a desvelar quién estaba tras su desaparición.

Tras su fogosa reconciliación, Pelayo estaba dispuesto a casarse con Catalina cuanto antes. Petra y Martina unieron sus fuerzas para destruir al hombre que ha intentado amargar sus vidas: el conde de Ayala.  Las sospechas sobre las verdaderas intenciones de Julia acorralaron a Curro, y Martina le recomendó que no se casase si no quería.

Recordamos que 'La Promesa' con un 12,5% de share y 953.000 espectadores consiguió en octubre su mejor cuota  del año. La serie mejoró el registro de la temporada pasada, y registró una de las mayores ventajas históricas sobre sus principales rivales. 'La Promesa' mantuvo el liderazgo de su franja y fue la segunda serie más consumida en diferido, con 274.000 espectadores.

¿Qué pasará en el capítulo del martes de 'La Promesa'?

En el nuevo capítulo de 'La Promesa',un nuevo desaire de Jana provoca la ira de Cruz, personaje de Eva Martín, que intercede para encargarse del vestuario de la muchacha. La intención de Lorenzo es que Curro acepte la propuesta de José Juan, hasta el punto que lleva a su hijo al límite. Se encrudece la situación de los marqueses con los duques de los Infantes, pero Cruz no parece dispuesta a dar su brazo a torcer.

Marcelo y Petra van a peor. El ama de llaves carga contra el muchacho ahora con otro motivo: el crucifijo desaparecido. Ya no existen, en apariencia, dudas en Pelayo y Catalina de cara a la boda, cuya fecha está más próxima de lo que podía parecer.