Un actor de 'Aída' triunfa gracias a 'Amar es para siempre' y su vida da un vuelco

Amar es para siempre se despedirá definitivamente de la audiencia a principios del próximo año. La longeva serie de Antena 3 ha sucedido a El Secreto de Puente Viejo como la serie española de sobremesa más vista. Una ficción que ha dado también muchas alegrías a intérpretes como el actor que trabajó en Aída y que ahora se ha convertido en imprescindible en la sobremesa.

Él es Sebas Fernández, también Sebas en la ficción. Su personaje comenzó su andadura al mismo tiempo que Amar es para siempre. Desde 2013 se hace pasar por un asturiano que ha conquistado al público por su naturalidad y simpatía.

Amar es para siempre ha dado el triunfo a uno de sus actores

Se trata de un personaje bien conocido por su papel en la pequeña pantalla, pero no tanto en la vida real. Pocos saben que, además, Sebastián Fernández también trabajó en series tan conocidas como Aída. El madrileño tiene ya experiencia en el mundo de la interpretación, decenas de películas, series de televisión y obras de teatro avalan su carrera.

Desde niño era el gracioso de la familia. Comenzó interpretando papeles en el Teatro García Lorca de Getafe y con algunas figuraciones en televisión. Series como Amar en tiempos revueltos, Cuéntame cómo pasó y Hospital Central aparecen al principio de su trayectoria profesional.

Su simpatía y espontaneidad le han mantenido en su sitio en la longeva ficción de éxito de Antena 3. En cuanto al personaje que interpreta, Sebastián ha reconocido en alguna entrevista que tiene muchas cosas en común con él. Sin embargo, destaca que en la vida real no es nada rácano, lo contrario que Sebas el de la ficción.

El actor, que lleva en Amar es para siempre desde la primera temporada, empezó como figurante y consiguió un papel fijo en la serie, con frases y tramas. Sus ocurrentes intervenciones le convirtieron en un habitual, de modo que acabó formando parte del elenco principal.

"Empecé de figurante en las primeras secuencias y poco a poco fui cogiendo protagonismo", contaba en una entrevista a El Periódico de España. "Me inventé que el personaje fuera caradura, estaba en el bar y cogía la frasca de vino y me echaba, o un torrezno por detrás de la barra...". Sebas, que nació en Getafe, reconoce que en su barrio hay "muchos bares y hay mucha fauna y fui añadiendo eso a mi personaje", señala.

De figurante a tener un papel en una de las series más longevas de la televisión

El actor se mostraba encantado de que, tantos años después, "siguen teniendo la imaginación de que haya tantas historias distintas". Su personaje come y bebe en casi todas las secuencias en las que aparece. "Estoy encantado de la vida, es como estar todo el día en el bar, pero cobrando", destacaba.

Un trabajo con el que ha visto reconocido su talento y que le ha dado la oportunidad de "trabajar con un montón de gente que he admirado toda la vida".

Sin embargo, no falta mucho para que Sebas, el de la ficción, diga el adiós definitivo cuando Amar es para siempre llegue a su fin. Un desenlace en el que habrá importantes reencuentros y momentos muy especiales para sus protagonistas. Será el final de la historia de los Gómez Sanabria en la Plaza de los Frutos.