Montaje con foto en un círculo rojo
SUCESOS

Barcelona, ciudad sin ley: un hombre pasea por la calle afilando un cuchillo

Un vídeo circula por internet demostrando que en muchos lugares de la ciudad condal ya no rige el imperio de la ley

El barrio del Raval de Barcelona sigue ofreciendo imágenes aterradoras sobre los niveles de inseguridad en las calles. Un vídeo que está circulando en la red social X (Twitter) muestra a un extranjero caminando tranquilamente por la calle mientras afila un cuchillo de grandes dimensiones. Una imagen tan sorprendente como espantosa, que demuestra que en muchas zonas de Barcelona ya no rige el imperio de la ley.

“Degradación total absoluta, una pena”, es uno de los muchos comentarios, más de 200, que acompañan las imágenes. Muchos se preguntan “cuándo vamos a acabar con esto”, y piden la deportación inmediata de los extranjeros delincuentes. “Son sus costumbres y hay que respetarlas”, dicen irónicamente, “luego los demás somos de extrema de derecha”.

Jaume Collboni (PSC) llegó a la alcaldía prometiendo revertir la inseguridad y la situación de degradación que sufre Barcelona desde hace años. Sin embargo, de momento no lo ha conseguido. A los problemas de incivismo se suman los robos, las agresiones sexuales y los actos violentos, que están en auge en la ciudad condal.

La semana pasada hubo varios tiroteos en distritos como Sant Adrià del Besòs y Nou Barris, pero el responsable de seguridad ciudadana, Albert Batlle, dijo que son “hechos aislados que obedecen a dinámicas de clanes”. Unas declaraciones que han hecho estallar a los vecinos, cansados de salir con miedo a la calle. El Raval es un punto especialmente caliente, donde las peleas y el consumo de drogas están al orden del día.

El Raval, situación límite

La semana pasada, el Raval fue escenario de una pelea multitudinaria y un robo en plena calle con enfrentamiento incluido. Uno de estos sucesos fue grabado por un vecino que lleva más de cuarenta años viviendo en el barrio, y denuncia la situación límite en la que se encuentran. El barrio se ha convertido en un pozo sin fondo de delincuencia e incivismo, y la policía apenas puede imponer su autoridad.

Los expertos advierten de que algunos lugares de Barcelona, especialmente en el Raval, son ya zonas no-go donde la policía casi ni entra. La delincuencia actúa con total impunidad mientras la izquierda mira hacia otro lado e incluso pide menos policía. Desafortunadamente, la imagen de un hombre paseando mientras afila un cuchillo forma parte del paisaje habitual de este barrio.

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