La luz de un coche patrulla, y en el círculo, la imagen de la chica asesinada y un lazo negro
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Conmoción por el asesinato de una joven de 28 años al lado de una comisaría en Grecia

La chica había roto la relación con su pareja hace un par de meses, pero él llevaba varios días acosándola


El asesinato de una joven de 28 años a las puertas de una comisaría tiene conmocionado a todo un país. Kyriakí recibió cinco puñaladas a manos de su expareja, a la que precisamente acababa de denunciar, solicitando además una orden de protección.

Al parecer, el presunto agresor llevaba varios días siguiéndola. Habían roto la relación hace un par de meses. En vista del constante acoso del que era víctima, decidió poner el caso en manos de la Policía.

La joven acudió a la comisaría de Hagios Anaryirios de Atenas en compañía de una amiga. A la salida, pidió protección policial para regresar a su vivienda, algo que se le negó. Le emplazaron a llamar al Grupo de Acción Inmediata para que le pusieran un coche patrulla.

Ella decidió salir del edificio policial, al tiempo que hablaba por teléfono con dicho servicio. Ese momento de descuido fue aprovechado por su expareja para asestarle varias puñaladas por la espalda. Varios testigos presenciales confirmaron que la chica trató de pedir ayuda cuando la agredieron.

Sin embargo, un guardia que "estaba a una distancia de 2 o 3 metros no reaccionó". 

La Policía le negó el vehículo

Las grabaciones telefónicas que se difundieron durante las siguientes horas no dejan en buen lugar al Grupo de Acción Inmediata. "Señora, el coche patrulla no es un taxi", le respondieron cuando contactó con ellos telefónicamente para que la llevaran al domicilio.

El agente que le atendió ha sido cesado de su cargo y ahora se enfrenta a responsabilidades penales y administrativas. Hasta el Gobierno, en boca de su portavoz, Pavlos Marinakis, mostró su malestar por lo ocurrido. "La mujer de 28 años debió ser salvada", apuntó.

El presunto responsable del crimen era un viejo conocido de las autoridades griegas. Tal y como recogen algunos medios, con anterioridad ya había sido acusado de provocar lesiones corporales, violencia contra sus empleados y posesión de drogas.

La víctima ya había presentado en el pasado alguna denuncia contra él por violación y violencia, en concreto en 2020. Sin embargo, la chica acabaría retirándola.

Quieren saber si se pudo hacer algo más

El portavoz del Gobierno prometió que se llevará a cabo una investigación en profundidad. Pretenden llegar hasta el fondo del caso y analizarán si se han respetado los protocolos obligatorios que deben seguirse en situaciones de violencia de género.

El padre de la joven señaló en la televisión local que había sido "un asesinato premeditado. La hubiese seguido hasta casa y la hubiera matado allí, estaba todo planeado".

La familia de la víctima no guarda precisamente buenos recuerdos del presunto agresor. Señalan que en el pasado la chica tuvo un aborto después de que el acusado le hubiera propinado una paliza. Sabían que en los últimos días estaba acosándola.

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