La OCU advierte de los riesgos de comer turrón de la Navidad pasada

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha alertado de un riesgo que, habitualmente, no se tiene en cuenta cuando llegan las comidas y las cenas de Navidad.

Son días de muchos gastos, entre las distintas comidas y regalos. Y, en ocasiones, para ahorrar un poco más, se asumen unos riesgos que en otro momento seguramente no asumiríamos.

Para hacer frente a todos estos gastos, muchas familias deciden ahorrar hasta el último euro. Y por este mismo motivo, muchos sacan el turrón que sobró de las Navidades pasadas, el cual, aparentemente, parece que está en buen estado.

Sin embargo, la OCU no ha dudado en alertar del riesgo que supone comer turrón de la Navidad anterior y los problemas que podría conllevar hacerlo.

Comer turrón de la Navidad pasada no es la mejor opción

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) lo ha dejado claro. Cuidado con comer turrón que sobró la Navidad pasada. Y es que, a pesar de que, a primera vista, parezca que está en buen estado, la OCU ha advertido de que no tiene por qué ser así.

A pesar de que muchas personas optan por terminar el turrón del año anterior durante las Navidades, y así evitar comprar uno nuevo, la OCU ha advertido que es necesario hacer caso de la fecha de caducidad o de consumo preferente.

Se trata de una fecha aproximada durante la cual el producto se encontrará en perfectas condiciones tanto por su sabor o textura, entre otros.

¿Qué hay que tener en cuenta antes de comer el turrón?

Si bien es posible que, en echar un vistazo a esta fecha, nos demos cuenta de que estamos dentro de la horquilla de tiempo estipulada, la OCUalerta que hay más factores a tener en cuenta.

La organización ha dejado claro que, para poder consumir el turrón del año pasado sin que esto conlleve problemas de salud para nosotros, hay que haber cumplido unas condiciones concretas.

Si queremos aprovechar este turrón que sobró de las fiestas pasadas, hace falta haberlo mantenido completamente precintado. Si, por el contrario, se ha mantenido abierto, la OCU asegura que es muy probable que ya no se encuentre en buen estado para ser consumido, por lo que deberá ser tirado directamente a la basura.

Tampoco deberemos consumir un turrón que haya estado durante un año o más tiempo en la nevera. La OCUalerta de que, cuando un turrón permanece un año en el frigorífico, el alimento adquiere un gran nivel de humedad, por lo que recomiendan no consumirlo. El sitio ideal para guardarlo, entonces, es a temperatura ambiente y en lugares cerrados.

Además, la OCU recuerda que un alimento en mal estado, en ocasiones, se puede reflejar en su olor y en su aspecto. De esta manera, si nos encontramos que el turrón del año pasado cumple con todas estas condiciones, sería mejor no consumirlo y desecharlo directamente.