Las frutas y verduras de temporada que puedes consumir en el mes de marzo

Comer fruta y verdura de temporada es una forma de hacer más saludable nuestra alimentación. Esto hace que sea mucho más fácil encontrar productos de proveedores locales. Además, estarán en el mejor momento para su consumo.

Por otro lado, también estamos hablando de una manera de garantizar que las verduras y las frutas sean buenas. Cuando no están en temporada es posible consumirlas exportadas o de invernadero. Y eso, a la hora de querer tener una alimentación de lo más saludable posible, no es algo positivo. 

También hay productos que podemos encontrar a lo largo de todo el año. En esos casos no hay temporada alguna, ya que la tierra los produce sin problemas a lo largo de todo el año. Pero para otros sí que tenemos que mirar el mes para ver si está disponible.

Frutas de temporada en marzo

1. Aguacate

El aguacate es una fruta que tiene un gran uso gastronómico consumiéndose en crudo. Puede usarse tal cual en tostas o ensaladas, o también vale para preparar, por ejemplo, guacamole. Hay que consumirlo rápido para que no se ponga negro, aunque esto se puede evitar con unas gotas de limón.

En cuanto a sus nutrientes, tiene un alto contenido calórico, pero hay que matizar que son grasas de las saludables. Asimismo, también podemos encontrar en esta fruta fibra, potasio, vitamina E, carotenos y ácido fólico. Es una opción bastante interesante.

2. Frambuesa 

Podemos encontrar esta fruta en los distintos supermercados disponible en bandejas. Sí que es verdad que es necesario tener en cuenta que se ponen malas rápidamente una vez se recolectan. Pero se puede evitar congelándolas y sacándolas cuando queramos consumirlas.

En este caso, la vitamina C es el principal nutriente a destacar de esta fruta de temporada de marzo. Pero tampoco nos podemos olvidar de que también presenta una gran cantidad de tiamina. Por último, contiene casi un 10% de fibra.

3. Fresa

Nos encontramos en plena campaña de la fresa y el fresón, justo en el ecuador de esta. Son muy versátiles a la hora de darles un uso. Se pueden comer tal cual con diversos acompañamientos o bien servir para cocinar otros platos.

En esta fruta encontramos un aporte de minerales tales como el potasio, el magnesio y el fósforo. Igualmente, también encontramos vitaminas, principalmente la C, acompañadas de antioxidantes. De la fresa se aprovecha casi todo, porque por ejemplo los granitos ayudan a estimular el tránsito intestinal.

4. Limón

Una fruta que nos sirve para elaborar tantas recetas como el limón también está de temporada. Puede usarse para hacer distintos platos o incluirlo en batidos, helados o tartas. Pero también se puede tomar en zumos o para aderezar comidas.

En este caso, los beneficios nutricionales son similares a los de otros cítricos. Por ello, tiene un alto contenido en vitamina C. Igualmente, seguro que has recurrido al agua de limón cuando hasta tenido algún episodio de diarrea.

5. Mandarina

A la mandarina le quedan unos pocos meses para su parón veraniego. Pero ahora es una fruta de temporada y como tal la encontramos en el mercado. En una forma sencilla de comer cítricos gracias a su facilidad de pelado y sus gajos.

Nos encontramos con una nueva fruta cítrica alta en vitamina C, aunque también tiene vitamina A. Por otro lado, encontramos minerales como el magnesio y el calcio. Para terminar, tiene un bajo nivel de calorías.

6. Naranja

Un caso similar al de la mandarina es el de la naranja. Esta está también ahora de temporada hasta darse un descanso en verano y volver a estarlo en el mes de septiembre. Aparte de comerse y servir para zumos, tiene numerosos usos dentro de la cocina.

Es una de las frutas que mayor aporte de vitamina C tiene para nuestro organismo. De ahí que sea reconocida por su alto valor como antioxidante. Y es que casi con una naranja puedes conseguir todo el aporte que necesitas de esta vitamina para un día.

7. Plátano

El plátano es una fruta que tenemos prácticamente disponible durante todo el año. Además, tiene distintas propiedades dependiendo del color que tenga. Si está verde es para personas diabéticas, siendo perfecto para deportistas cuando está amarillo.

En cuanto a su información nutricional, es conocido por su aporte de minerales como el potasio o el magnesio. Por otro lado, tiene un alto nivel calórico por su contenido en azúcares e hidratos de carbono. Esta cantidad es superior a la media que tienen las frutas.

8. Pomelo

Esta fruta cítrica tiene un sabor a medias entre lo cítrico y lo dulce. Podemos encontrarlo en color rojo, usado sobre todo en platos de alta cocina. También se vende en color amarillo, que es el que se usa, por ejemplo, para preparar zumos.

Volviendo a las características de las frutas cítricas, la vitamina C vuelve a estar presente. De esta forma, estamos hablando de un alimento con un alto poder antioxidante. En los pomelos rojos, también se puede decir que son ricos en carotenoides y no tienen mucha fibra.

Verduras de temporada en marzo

1. Acelga

La hoja y el tallo de esta verdura es la parte comestible. Normalmente, se suele comer cocida con un refrito, pero también se le puede dar más usos. Por ejemplo, puede ser un ingrediente más dentro de un puré.

En su información nutricional llama la atención la cantidad de vitamina A, B y C que tiene. Asimismo, también encontramos carotenoides y ácido fólico. Por último, tiene pocas calorías y fibras y no contiene grasas ni proteínas.

2. Alcachofa

Estamos en uno de los últimos meses en los que se puede consumir esta verdura, ya que en abril serán los restos de las cosechas. En el mercado las encontramos disponibles en muchos formatos. Aunque para asegurarte que es de temporada, lo recomendable es comprarla en la sección de verduras.

Tiene una gran cantidad de minerales y oligoelementos. Asimismo, tiene un alto aporte tanto de hidratos de carbono como de proteínas. Por último, su alto porcentaje de fibra nos ayuda con el tránsito intestinal.

3. Apio 

Tiene un calendario de temporada similar al de la alcachofa. Al apio apenas le queda un mes hasta volver a estar de temporada en el mes de noviembre. Es un ingrediente a tener en cuenta para incluirlo en nuestras ensaladas.

El apio es rico en vitaminas A, B, C y K. Asimismo, también puede presumir de tener un alto contenido de agua, ácido fólico, fibra y potasio. Además, es un gran aliado para todas aquellas personas que quieran bajar de peso.

4. Brócoli

Este alimento ofrece diversas posibilidades a la hora de cocinarlo. Puedes comerlo hervido con un refrito, gratinado, rebozado e incluso hacer hamburguesas con él. Hay una amplia variedad para no tener excusa.

Las vitaminas C y B son las que mayor presencia tienen en esta verdura. Eso sí, hay que tener cuidado a la hora de cocerlo para que no nos pasemos y estas se vean disminuidas. Por otro lado, también tiene minerales y una alta cantidad de fibra.

5. Col lombarda

Si te gusta esta verdura, estamos en el último mes hasta que llegue noviembre que podrás comerla de temporada. Aunque sí que es verdad que a la hora de cocerla huele bastante mal, eso no influye a la hora de comer. Además, luego es muy versátil a la hora de escoger cómo la queremos cocinar.

La vitamina C es la que más encontramos en esta verdura, acompañada de ácido fólico. Para aquellas personas que necesiten fibra, aquí van a encontrar un aporte bastante importante. Por último, si estás a dieta de bajas calorías, apenas las encontrarás en este alimento.

6. Coliflor

Similar a la anterior verdura, deberemos tener cuidado a la hora de cocerla por su olor, aunque se puede rebajar con leche. Puedes comerla de distintas maneras, dependiendo de tus gustos. Puede ser cocida, rebozada, gratinada, salteada...

En la coliflor también encontramos un alto aporte de vitamina C. Esto supone que tenga un gran poder antioxidante. De nuevo, la fibra está muy presente, aunque pueda provocar que no sea tan fácil de digerir.

7. Endibia

En este mes de marzo también diremos adiós a la endibia como verdura de temporada. En este caso, habrá que esperar hasta octubre a que vuelva a estar disponible. Es perfecta para servir de recipiente para canapés que incluyan queso o anchoas, por ejemplo.

De nuevo, vuelve a salir a relucir el ácido fólico por estar presente en una verdura. En este caso, también hay que hablar de la intibina que ayuda a proteger el hígado, aunque le aporte un sabor amargo. Asimismo, es interesante tener en cuenta para cocinar que es una verdura con bajo aporte calórico.

8. Espárrago verde

No son muchos los meses en los que el espárrago verde está de temporada, pero marzo es uno de ellos, así que hay que aprovechar. Puede ser desde un protagonista de las barbacoas hasta el de una crema. Son muchas las formas de poder disfrutar de él.

No tienen apenas calorías y además, por su poder diurético nos ayuda a eliminar toxinas. Para las dietas bajas en calorías también es una gran opción porque está compuesto en gran parte de agua. Por último, añadir que tiene una baja presencia de nutrientes energéticos.

9. Espinaca

Es importante que esta verdura esté fresca para poder conseguir todos sus beneficios. Por eso, puedes conservarla en la nevera unos días sin que esté completamente cerrada. A la hora de cocinar, cuanto más natural esté, mucho mejor.

Volvemos a repetir que la mejor forma de aprovechar los nutrientes de las espinacas es comerlas crudas. Así podrás conseguir su aporte en vitamina A, C y ácido fólico. Asimismo, también es importante destacar que tiene un alto contenido de minerales.

10. Guisante

Tanto como acompañamiento, como parte de un plato con elaboración como puede ser un puré son perfectos. Esta verdura aporta un toque dulce que muchas recetas necesitan. Por cierto, hay personas que lo consideran verduras y para otras es una legumbre.

Este último dato que te hemos dado es importante para conocer su información nutricional. Por un lado, se puede decir que es rico en proteínas, como las legumbres, y que tiene fibra. Asimismo, su lado de verdura es el que le proporciona la cantidad de vitamina C que encontramos en él.

11. Haba

Hay muchas formas de comerlas, pero a la hora de cocinarlas, su tamaño importa. En el caso de las pequeñas no hay mayor problema, pudiendo comerse incluso crudas, más grandes, es necesario cocerlas. No están mucho tiempo de temporada, así que ahora es momento de aprovechar.

Este es otro caso de un alimento que se considera a la vez verdura y legumbre. Por eso mismo, volvemos a encontrar en su información nutricional tanto proteínas como vitamina C. A estas hay que añadirle el contenido que presenta de fibra y ácido fólico.