Un cliente estalla contra Lidl por lo que le ha pasado en caja: '¿Cómo puede ser?'
Un problema con los precios en las cajas de Lidl indigna a uno de sus clientes que rompe en las redes sociales
Hace unos días, un cliente de Lidl decidió quejarse de un problema con sus precios a través de X. No es la primera vez que la red social que, hasta hace poco, era Twitter, sirve de altavoz para las quejas de los usuarios.
Los supermercados Lidl están más que bien posicionados en España. Gracias a la variedad y a los precios en algunas secciones, como los lácteos o su bazar, que cambia semanalmente.
Sin embargo, no todo es perfecto y controlable al 100%. Y el supermercado puede caer en errores según de qué tienda se trate, a la hora de aplicar los precios indicados.
X se hace eco de la queja de un cliente de Lidl
Un usuario de X, también cliente de Lidl, ha aprovechado el altavoz que la red social le presta para quejarse. Al parecer, el supermercado ofertaba unos precios que no le quisieron ser aplicados a la hora de pagar.
En su mensaje, el usuario de X @alvaro_camphos etiquetaba a Lidl hablando del percance que acababa de tener. Y hacía referencia a que, a causa de la hora, no quisieron aplicarle unos descuentos.
Estos precios, según la respuesta de Lidl, formaban parte de los aplicables para los usuarios de Lidl Plus. Esta es la aplicación móvil para los clientes de Lidl. Solo si dispones de esta aplicación, es posible que los descuentos señalados en los precios se apliquen, así respondía Lidl al usuario de X.
Los precios no se aplican y esta es la respuesta de Lidl
Sin embargo, ese no era el problema. Aun disponiendo de la app de Lidl, los precios no se llevaron a cabo. Y lo mejor, es el motivo por el que esto no sucedió.
Según relata @alvaro_camphos en su respuesta, de nuevo, el problema fue la hora. La asistenta de caja le hizo saber al comprador que los precios de los descuentos no se aplicaban a partir de las 21:00 horas.
Lidl, por su parte, se ha visto obligado a responder pidiendo al cliente sus datos en la aplicación del supermercado. Se entiende que el fin será resolver el problema con los precios de alguna manera.
Pero, para una marca como Lidl, una respuesta así no vale. Deberá ofrecer alguna alternativa como recompensa por el error de sus operarios de no haber aplicado los precios marcados en tienda.
Sin embargo, nunca viene bien una disculpa, sobre todo, si es públicamente. Pero, en este caso, Lidl se ha limitado a que lo que se muestre en la red social, sea solo eso.
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