Los 10 sencillos cambios saludables que te propongo como nutricionista

A veces, por falsas creencias que tenemos, pensamos que llevar una alimentación saludable y equilibrada es muy complicado. Pensamos que es una rutina disciplinaria que se escapa de nuestras manos, lo vemos casi una misión imposible. 

Pero dejadme deciros que esto para nada es cierto… Por suerte, podemos hacer cambios muy pequeños, casi insignificantes, pero que sumados todos juntos comportan un cambio importante en nuestra alimentación global. 

Y como muchas veces digo, estos cambios empiezan en la compra, ya que es ahí donde debemos de tomar decisiones importantes. Si no lo tenemos en casa, por mucho que nos apetezca algo insano, difícilmente lo comeremos. 

Claro que hay quien tiene la versión de coger y pedir comida online para cenar, pero ya sabemos que esto debería de ser una opción ocasional, y que siempre será mucho más saludable cualquier cosa que te hagas tú mismo en casa. De esta forma, podemos controlar los ingredientes y la forma de cocinado. 

Diez cambios sencillos para llevar una alimentación saludable

Hay pequeños cambios que puedes aplicar en tu día a día para mejorar tu alimentación. Estos son los diez hábitos que te aconsejo como nutricionista:

1. Cambia los yogures de sabores por yogures naturales con fruta, así te ahorrarás mucho azúcar añadido.
2. Sustituye el cacao en polvo azucarado por cacao puro desgrasado. Es amargo, por lo que con una puntita bastaría.
3. Fíjate en el porcentaje de carne de los embutidos y consume aquellos de al menos 85% de carne.
4. Come los carbohidratos integrales y no blancos, de esta forma te aportarán mucha más fibra y te saciarán más.
5. Consume todos los frutos secos al natural o tostados y sin sal añadida.
6. Compra chocolate negro con alto porcentaje de cacao, no aquellas versiones azucaradas.
7. Decántate por quesos rallados tipo mozzarella o emmental y no aquellos en los que pone "especial pasta" o "especial fundir".
8. Sustituye los quesos en lonchas tipo de hamburguesa por quesos saludables.
9. Cambia los cereales azucarados por versiones sin azúcar como copos de maíz o copos de avena.
10. Consume pan 100% integral y no panes con harinas refinadas o panes de molde.

Se ve bastante viable, ¿verdad? Empezad por uno, el que os resulte más fácil, e id haciendo poco a poco.