Y Alejandro Fernández ganó la partida a Alberto Núñez Feijóo

Este 12-M, el PP cosechó uno de los mejores resultados de su historia en unas elecciones catalanas. Solamente Alejo Vidal-Quadras en 1995 (17 diputados) y Alicia Sánchez Camacho en 2010 y 2012 (18 y 19) consiguieron más escaños de los 15 que sumó el Partido Popular de Cataluña el pasado domingo.

La diferencia entre los resultados obtenidos por Alejandro Fernández este 12-M y sus predecesores es que, ahora, los populares compiten con Vox en el espacio de la derecha constitucionalista en Cataluña. Algo que le da más mérito todavía al actual líder del PP catalán.

En cierto modo, pues, Alejandro Fernández le ha ganado la partida a Alberto Núñez Feijóo, que antes de las elecciones de este 2024 barajó la posibilidad de relevar a Fernández al frente del partido en Cataluña. 

Hubo debate interno, promovido por Génova, sobre quién debía liderar el PP catalán en estos comicios. Sin embargo, el amplio apoyo del que gozaba Alejandro Fernández entre el mundo constitucionalista catalán y entre algunos de los pesos pesados del partido (como Isabel Díaz Ayuso o Cayetana Álvarez de Toledo), hicieron desistir a Feijóo de su intención de forzar un cambio en al frente del partido en Cataluña.

Que a Génova no gustó que Alejandro Fernández cuestionara su estrategia respecto a Junts es evidente. El presidente del PP en Cataluña siempre ha defendido una postura intransigente respecto al partido de Puigdemont. Y cuando vio el intento de acercamiento de la cúpula de su formación hacia los nacionalistas catalanes, no dudó en alzar su voz para reivindicar la ya famosa frase de “yo con Junts no voy ni a cobrar una herencia”.

A pesar de las intenciones de Feijóo, con el adelanto electoral en Cataluña no tuvo más remedio que ceder y permitir a Alejandro Fernández ser el candidato. A cambio, el gallego llenó las listas de personas afines a él y a la cúpula nacional, llegando así a un equilibro interno de cara a unas elecciones que eran decisivas para el PP.

El resultado ha sido evidente: Alejandro Fernández ha demostrado que no solamente fue un acierto que Génova cediera y apostase por él como candidato. De paso, también refuerza sus posicionamientos ideológicos dentro del partido. El constitucionalismo en Cataluña premia la intransigencia contra el procesismo promovida por Fernández.

Además del discurso duro contra socialistas y procesistas, Alejandro Fernández apostó también por un programa basado en la lucha contra la inseguridad y contra “el infierno fiscal que hay en Cataluña”. Por todo ello, los 15 diputados conseguidos no hacen más que reforzar su figura dentro del PP.

Más allá de esto, si una cosa tiene Alejandro Fernández es que es un hombre de partido. Este también es el motivo que le empuja a alzar la voz cuando ve que su formación quiere tomar caminos que él considera erróneos. Pero independientemente del debate interno, el líder del PP catalán no quiere hacer sangre de la situación. Una vez conocidos los resultados, hizo partícipe del triunfo a un Alberto Núñez Feijóo que arropó a Fernández en muchos actos de campaña. “Este es un éxito compartido con Alberto Núñez Feijóo”, dijo en RAC1.

Veremos qué pasa en un futuro. Por ahora, no está previsto que haya relevo al frente del PP catalán en los próximos meses. Algo que, si intenta forzar Génova, sería inexplicable después de los buenos resultados del 12-M. De hecho, el mismo Alejandro Fernández ya explicó el lunes que, en caso de repetición electoral en Cataluña, “está bastante claro” que él repetiría como candidato.

En cualquier caso, el éxito de Alejandro Fernández el pasado domingo evidencian un win-win para él y para su formación. Él sale reforzado ante Feijóo y este también ve como los buenos resultados en Cataluña le pueden servir de trampolín para cosechar otro triunfo en las próximas elecciones europeas del 9 de junio.