Un agente de seguridad detiene a dos carteristas en un aeropuerto.
POLÍTICA

VÍDEO | Pillan a dos carteristas en el aeropuerto del Prat: '¿Qué hacéis aquí?'

No solo la ciudad tiene un problema de inseguridad: el aeropuerto de Barcelona también lidia con los robos

Cataluña vive un aumento general de la inseguridad. Por el momento, este crecimiento gira en torno a los delitos de baja intensidad. Sin embargo, para algunos expertos en la materia, esto puede ser la antesala - “zona de confort criminal”, se llama - de un aumento más preocupante de la inseguridad.

Esto explica que en Barcelona abunden los robos sin violencia, los pequeños hurtos y los carteristas. Sin ir más lejos, hoy mismo, los Mossos d’Esquadra explican que han hecho un macrooperativo contra el robo de patinetes. Según los datos que han ofrecido, los 112 identificados acumulaban 473 delitos.

Esta impunidad delictiva se ha traslado a un lugar en el que, en principio, nadie pensaría que es un lugar inseguro. Nos referimos al aeropuerto.

Personas caminando con maletas en un aeropuerto, con un letrero de salida de emergencia a la izquierda y un letrero de

Problemas de seguridad en el Prat

Ciertamente, para un carterista, el aeropuerto de Barcelona no es un mal sitio para robar. Hay una gran afluencia de personas (turistas, sobre todo), los viajeros usan constantemente su cartera y es fácil perderse entre la multitud.

En este sentido, ya se han compartido bastantes vídeos e imágenes sobre la inseguridad en el aeropuerto. Se trata de robos especialmente molestos para los viajeros porque perder los documentos de identidad implica no poder tomar el avión.

El último de estos vídeos lo ofrece Víctor Riverola, que de un tiempo a esta parte se ha concentrado en denunciar la degradación de Barcelona a casi todos los niveles. En el vídeo se aprecia el momento en el que se identifica a dos mujeres carteristas, que son detenidas por la seguridad privada del aeropuerto:

El vídeo ha adquirido bastante visibilidad, pero lo cierto es que los ciudadanos ya están lo suficientemente acostumbrados a estas situaciones como para sorprenderse.

La reacción unánime es de indignación ante el hecho de que lo más probable es que estas dos mujeres queden en libertad en poco tiempo y, lo que es peor, vuelvan a robar.

“Mientras no haya mano dura todo seguirá igual, después sale la gente defendiendo los derechos de los delincuentes y abuso policial”, “¿Y qué? Mañana al metro y ya está”, “Da igual cuándo leas esto, están allí robando otra vez...”, comentaban los usuarios. 

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