Ultimátum de Vox al PP
Los de Abascal urgen a los populares a cerrar un pacto en Murcia
Vox y PP han enterrado momentáneamente sus diferencias ante la urgencia de investir un gobierno alternativo al “sanchismo”. Santiago Abascal habló de “una nueva etapa entre dos formaciones muy diferentes pero capaces de respetarse”. Alberto Núñez Feijóo resaltó la “relación de normalidad democrática en distintas instituciones donde gobernamos”.
La mención de los pactos de gobierno en comunidades autónomas y municipios no es baladí. Los gobiernos conjuntos en Castilla y León, Aragón, Comunidad Valenciana, Baleares y Extremadura, además de 140 municipios y seis capitales de provincia, son la línea maestra de la unidad estratégica de la derecha.
En este sentido, la crisis abierta en el Gobierno de Murcia sigue siendo la tarea pendiente para acabar de consolidar la alianza. Vox lanza un ultimátum al PP para alcanzar un acuerdo regional que sería definitivo a nivel nacional. Quedan diez días para la fecha clave.
El tiempo se agota
Si el 7 de septiembre Fernando López Miras (PP) no ha conseguido los apoyos suficientes para ser investido, se convocarán nuevas elecciones en Murcia. Habrá naufragado así la mayoría conservadora para formar gobierno. Vox sigue exigiendo su presencia en el Ejecutivo, y el PP sigue rechazando esa opción alegando que solo necesita dos abstenciones para la investidura.
Tan enrocadas están las posiciones que hasta este martes todos daban por hecho que habría repetición de elecciones. Pero el acuerdo in extremis PP-Vox en el Congreso de los Diputados lo cambia todo. Los de Abascal urgen ahora a reconducir la situación en Murcia.
El portavoz de Vox en la Asamblea Regional, Rubén Martínez Alpáñez, ha reafirmado su compromiso para un entendimiento con el PP. Pero ha tildado de “increíble” que el PP aún no haya convocado una reunión entre los dos partidos. “Nosotros vamos a hacer todos los esfuerzos para que no haya repetición electoral”, ha dicho.
El PP se desmarca
Mientras Vox aumenta la presión, los populares insisten en desvincular el acuerdo nacional de los pactos regionales. En Génova insisten en que no hay novedades de momento en el caso de Murcia, y ceden toda su confianza en López Miras. En el PP murciano responden que la situación se podría desencallar la semana que viene.
La realidad es que por ahora no ha habido avances en las negociaciones y el tiempo se está agotando. Pese a que el PP quita hierro al asunto, la repetición electoral en Murcia sería un golpe duro de encajar en ambas formaciones.
En juego está no solo el gobierno de la región, sino también la frágil relación de confianza que Abascal y Feijóo se han preocupado de restaurar. Si Extremadura marcó un punto de inflexión entre ambas formaciones, Murcia puede ser la sentencia definitiva. Si Vox y PP no llegan a un acuerdo, obligaría a replantear de nuevo sus relaciones.
Mucho en juego
En el trasfondo de la desconfianza está la sensación de que el rechazo de amplios sectores del PP hacia Vox. Muchos populares ven con recelo la competencia de Vox en su espacio electoral, y además les acusan de aires de grandeza. Los de Abascal se sienten menospreciados y reclaman presencia en las instituciones y respeto a sus votantes.
El calendario de Murcia se enreda diabólicamente con el de la investidura en España. El 6 es la fecha límite para la formación de gobierno en Murcia, y el 26 y 27 tendrá lugar el debate de investidura en el Congreso de los Diputados. Un acuerdo de gobierno en Murcia sería crucial para afrontar la investidura de Feijóo con garantías.
Esta semana, Fernando López Miras ha dejado claro que Feijóo “es la única alternativa frente a Pedro Sánchez maniatado por Bildu y los secesionistas”. Su apelación a derrotar al sanchismo puede ser una señal de que algo ha cambiado. Lo veremos en los próximos días.
Más noticias: