Hasta los sindicatos se quejan de Correos y el voto por correo

Los sindicatos CCOO y UGT han emitido un duro comunicado contra la situación en Correos a cinco días de las elecciones. Faltan 48 horas para que finalice el plazo para votar por correo. Casi medio millón de españoles siguen sin poder hacerlo y el tiempo se acaba.

Estas elecciones son atípicas porque se producen en período veraniego y se han duplicado las solicitudes de voto por correo. Correos prometió reforzar la plantilla, pero los sindicatos han denunciado la falta de personal. Ante el riesgo de que muchos españoles se queden sin votar, los sindicatos han roto su silencio.

CCOO y UGT cargan directamente contra el director de Correos, Juan Manuel Serrano, por su “nefasta gestión y planificación”. Hay que recordar que Serrano es una persona de la máxima confianza de Pedro Sánchez. Y esto ha desatado todo tipo de suspicacias.

Medidas que llegan tarde

Los sindicatos denuncian que las medidas adoptadas por Correo llegan tarde. Por ejemplo, el aumento de las contrataciones, con la firma de 19.400 nuevos contratos para reforzar la plantilla. También la ampliación del horario de las oficinas, los repartos extraordinarios y las horas extra para llegar a todas las casas.

Los sindicatos afirman que su presión fue clave para que el presidente de Correos pusiera en marcha estas medidas. De hecho, critican la falta de relación de Correos con los sindicatos.

Donde se muestran más críticos es en el “apagón informativo decretado por Correos desde el inicio de la campaña”. Consideran “inaceptable” la “dilatación premeditada de la exigencia de una reunión con todos los sindicatos”. El objetivo era “buscar soluciones conjuntas al problema que se avecinaba”.

Los sindicatos, contra Sánchez

Ante la avalancha de críticas, el presidente del Gobierno ha negado que haya un problema con el voto por correo. De hecho, ha acusado a Feijóo de embarrar la campaña poniendo la duda sobre Correos. La denuncia de los sindicatos deja en mal lugar a Pedro Sánchez.

Por un lado, denuncian que solo se hayan reunido una vez teniendo en cuenta la gravedad de la situación. Por otro lado, acusan a Correos de haber ocultado datos y ensalzan el esfuerzo extra de la plantilla. Lo cual demuestra que efectivamente han estado en riesgo los votos de millones de españoles.