Primer plano de Carles Puigdemont con cara de circunstancias en el congreso de Junts per Catalunya

POLÍTICA

La resurrección de Puigdemont descoloca al Govern

Codazos entre Junts y ERC por el favor de Sánchez

Junts y ERC no han parado de darse codazos desde que se disputan la investidura de Puigdemont. La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, en su comparecencia de este martes ni siquiera citó al partido de Puigdemont por su nombre.

Plaja llegó a hablar en nombre de los catorce diputados independentistas en el Congreso, a pesar de que la mitad son de Junts. E insistió que las negociaciones tienen que recaer en “el Govern de la Generalitat” a pesar de que son entre grupos parlamentarios.

“El Govern tendrá un papel importante en estas negociaciones”, insistió. El pasado día 5, tras la comparecencia de Puigdemont, también marcó terreno al recordar que la amnistía y la autodeterminación “son los objetivos del presidente de la Generalitat desde el primer día”. Incuso lanzo alguna indirecta al partido de Puigdemont: “celebramos que haya también ahora Junts per Catalunya”.

La portavoz del Gobierno de la Generalitat en el atril dando una rueda de prensa

El Govern de ERC, ahora en minoría, ha quedado descolocado por el protagonismo mediático de Puigdemont a dos años de las elecciones al Parlament. Puigdemont ha recuperado protagonismo político en el peor momento: cuando se le había retirado la inmunidad.

El líder de ERC, Oriol Junqueras, ya quiso marcar perfil dos días antes con una entrevista en La Vanguardia. Junqueras lanzó el mensaje de que “la amnistía es fundamental” pero que “no es el punto final de nada, sino el punto inicial”. 

La resurrección de Puigdemont empezó el lunes 4 antes con la visita sorpresa de la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, a un fugado de la justicia.

Jaume Asens, el portavoz de Sumar en las negociaciones, había preparado el terreno con otra entrevista en el diario Ara, próximo a Esquerra, dos días antes, en el que afirmaba que "Sería positivo que un líder estatal interlocutara directamente con Puigdemont en Bélgica". 

Todo el mundo pensó entonces que se refería a un cargo del PSOE para establecer puentes de diálogo. Pero lo decía por la líder de su propio partido. 

Era evidente que ya sabía que Yolanda Díaz iría a Bruselas dos días después. Él mismo formaba parte de la delegación.

La comparecencia de Puigdemont fue el martes y eclipsó la rueda de prensa posterior de la portavoz del gobierno catalán. La propia Plaja tuvo que admitir que la habían seguido durante la reunión. 

Imagen de Oriol Junqueras y Carles Puigdemont mirando cada una para un lado

Las diferencias e intercambios entre Esquerra y Junts no han parado de crecer desde entonces. Pere Aragonès dejó claro el domingo, esta vez en una entrevista en El Periódico, que “quien negocia en nombre de Catalunya es el Govern”. 

Mientras que el secretario general de Junts, Jordi Turull, aprovechó la misma Diada para responder. Tras la ofrenda floral a Rafael Casanova lamentó que se les había “vetado” durante seis años.

En el fondo, los codazos de última hora demuestran, en parte, que el proceso fue también una luchar por el poder. Junts -entonces CDC, un partido desaparecido bajo la losa de la corrupción- y Esquerra se disputaban la hegemonía en el bando nacionalista. 

Puigdemont eclipsa el Govern