Puigdemont, la última esperanza de Feijóo
El futuro del candidato del PP, en manos del líder de Junts
Alberto Núñez Feijóo lo ha probado todo para ser el próximo presidente del Gobierno. Con sus propios votos más los de Vox, Coalición Canaria y UPN, al popular solo le faltan cuatro para poder superar con éxito la sesión de investidura de los días 26 y 27 de septiembre. Pero el PP ha chocado con la realidad y, tras repartir propuestas a diestro y siniestro, ya no le quedan alternativas para conseguir más apoyos.
El PSOE huele la sangre y no piensa ceder ninguna abstención en la investidura de Feijóo. El PNV tampoco tiene ni la más mínima intención de dar sus votos al PP mientras Vox entre en la ecuación. Y los procesistas tienen unas demandas que los populares no pueden asumir ni siquiera acercarse a ellas. Con todo este contexto, solo un milagro provocaría el triunfo de Feijóo en la sesión de investidura de finales de septiembre.
Feijóo, cada vez con menos opciones para ser presidente del Gobierno
De este modo, Feijóo está acorralado. Y ya no solo es difícil que sea investido presidente, sino que ahora lo que ya está empezando a entrar en juego es su futuro político. Si Sánchez consigue los votos necesarios para ocupar de nuevo la Moncloa, las dudas sobre el líder popular aumentarán.
Muchos se preguntarán hasta qué punto tiene sentido que siga liderando el partido tras ser incapaz de formar una mayoría. Y más, teniendo en cuenta el contexto favorable que tenía tras las elecciones municipales del 23 de mayo. No hay que olvidar que en plena campaña, incluso desde Génova se deslizaba la idea de poder llegar a una mayoría absoluta que quedó a años luz del resultado real del 23J.
Es probable que lo único que mantenga en vida la carrera de Alberto Núñez Feijóo es la posibilidad de una repetición electoral el próximo enero. El líder popular tendría una nueva oportunidad para ampliar su ventaja e intentar otra vez obtener una mayoría en el Congreso. Y, ante este escenario, para el PP sería seguramente más cómodo cerrar filas en torno a él que iniciar un cambio de liderazgo dentro del partido.
Ahora mismo, esta hipotética repetición electoral está básicamente en manos de Carles Puigdemont. El PSOE necesita el sí de Junts para llegar a los 176 votos necesarios para que Pedro Sánchez fuera reelegido. Los procesistas son los que, previsiblemente, harán sudar más al PSOE para regalarle sus votos, a diferencia de Bildu, PNV y ERC que ya se han mostrado más que dispuestos a apoyar a Sánchez.
Eso sí, Junts ya ha pactado con los socialistas para que Francina Armengol sea la presidenta de la Mesa. Además, han llegado a un acuerdo para que los juntaires puedan tener grupo parlamentario propio en el Congreso. Por si fuera poco, los socialistas también están dispuestos a ceder senadores para que hagan lo mismo en el Senado.
En resumen, todo apunta a que los juntaires acabaran cediendo ante el PSOE porque se juegan demasiado dinero. Y este es el principal problema para Feijóo: que ve cómo su futuro está en manos de un Carles Puigdemont que ya no tiene ningún reparo en pactar con los socialistas. Y esta es una muestra clara de su caída libre como político: de "derogar al sanchismo" a depender de lo que haga Puigdemont.
En los últimos días han salido informaciones sobre Feijóo y una posible alternativa por la que podría apostar. Se trataría de dejar que Sánchez gobernase gracias a los procesistas, pero que una vez les haya concedido la amnistía, ERC y (sobre todo) Juntos acaben dejando caer al líder socialista a media legislatura, en 2025 aproximadamente. Más allá de ser una idea con demasiados condicionantes, sería un escenario en el que el propio Feijóo seguiría dependiendo de la voluntad de Puigdemont.
Más noticias: